En el mundo del Dakar, Ari Vatanen es voz autorizada para hablar de la prueba de rally off road más extrema y dura del mundo, especialmente en la categoría de coches.

El finlandés, cuatro veces campeón de la competencia (1987, 1989, 1990 y 1991), sabe lo que es enfrentarse al desierto y sobrevivir para contarlo. Incluso en 1988 figuraba como el principal favorito par quedarse con la prueba, no obstante el robo de su coche desde el parque de asistencia acabó con el sueño.

Ligado por siempre al mundo tuerca, sigue de cerca el desarrollo del Dakar, pese a que no corre en él desde 2007, cuando se realizó la última versión en África y no tiene problemas para asegurar que no hay comparación en el desarrollo de la competencia en ambos continentes.

Al respecto, y en entrevista con El Mundo de España, le quitó peso a las ediciones sudamericanas del Dakar y la complejidad que la prueba toma en este lado del orbe, pese a que este año todos los pilotos se han quejado de lo duro y extremo que han sido algunas etapas, lo que se ha traducido en los múltiples abandonos, retiros, incendios de vehículos, delirios en plena competencia e incluso la muerte de un piloto en carrera.

Sin embargo, al ser consultado si el Dakar ha recuperado la dificultad que exhibió en las ediciones africanas, Vatanen no tuvo reparos en asegurar que no.

‘Creo que se mantiene la competición, se mantiene lo impredecible de la prueba, que uno sufra un problema mecánico en cualquier momento y pierda todas sus opciones de victoria’ aseguró el finlandés que se coronó a bordo de un peugeot en sus tres primeros triunfo y en Citroen el último.

La gran diferencia para quien también fuera campeón del mundial de rally es que en África todo era mucho más salvaje y existía menos ‘civilización’ que en Sudamérica.

‘No había tanta ayuda de nadie, ahora está todo más medido, es más mediático’ explica Ari Vatanen.

En cuanto a la edición 2014 en coches, Vatanen aseguró que Nani Roma asoma como una gran carta para quedarse con la prueba, sin embargo, tendrá que lidiar con la presión de tener a sus espaldas al ‘Mr Dakar’ Peterhansel que le ha descontado importantes minutos.