Un cohete Rockot fue lanzado desde una base espacial rusa con tres satélites europeos Swarm destinados a estudiar desde el Espacio el campo magnético terrestre, según imágenes transmitidas en directo por la Agencia Espacial Europea (ESA).

El cohete despegó este viernes desde la base de Plessetsk, ubicada en el norte de Rusia.

Estos tres satélites Swarm, cada uno de los cuales pesa 473 kilos, evolucionarán en trayectorias ligeramente diferentes, lo que debería permitir separar bien las diferentes fuentes magnéticas y cartografiar sus variaciones en forma detallada.

Gracias a los datos recabados por Swarm durante al menos cuatro años, los científicos esperan profundizar su comprensión de la evolución del campo magnético, un fenómeno complejo y fluctuante que sigue siendo poco conocido.