Diez miembros de la tripulación del barco de Greenpeace abordado en septiembre por un comando ruso en el Ártico salieron de la cárcel este jueves en San Petersburgo (noroeste), entre ellos la argentina Camila Speziale, anunció la ONG en su cuenta de Twitter.

La argentina Camila Speziale, el francés Franscesco Pisanu, la finlandesa Sini Saarela, la danesa Anne Jensen, el italiano Cristian d’Alessandro, el polaco Tomasz Dziemianczuk y el neozelandés David John Haussmann fueron liberados el jueves por la noche tras el pago de una fianza de 45.000 euros por cada uno, según la ONG.

El portavoz de Greenpeace en Rusia, Andrei Alajverdov, el médico del barco, Yekaterina Zaspa y el fotógrafo freelance Denis Siniakov habían salido de la cárcel previamente.

“No es un punto final, sino una coma” por el momento, declaró Siniakov, que se encontró con su esposa delante de un enjambre de periodistas.

Los 30 activistas formaban parte de la tripulación del barco “Arctic Sunrise”, detenido en septiembre por un comando ruso en helicóptero después de que parte de sus tripulantes llevaran a cabo una acción contra una plataforma petrolera en el Ártico para denunciar los riesgos de esta explotación.

Todos ellos fueron inculpados de “piratería” y posteriormente de “vandalismo”. La justicia rusa no dejó claro si la primera acusación, que conlleva una pena de hasta 15 años de prisión, fue levantada. La segunda puede acarrear una pena de hasta siete años.

La víspera, la brasileña Ana Paula Alminhana Maciel fue la primera de los militantes en dejar la cárcel.

La brasileña tuvo que proporcionar a los investigadores su dirección temporal en San Petersburgo, pero se desconoce si puede abandonar Rusia, precisó a la AFP un representante de Greenpeace, Mijail Kreindlin.

Según esta misma fuente, a los ciudadanos rusos no se les prohibió abandonar la ciudad.

Sin embargo, los investigadores conservaron sus pasaportes.

Este jueves, la justicia rusa concidió la libertad bajo fianza al neozelandés John Beauchamp, al ruso Ruslan Yakushev, a los británicos Frank Hewetson e Iain Rogers, al canadiense Alexandre Paul y a la turca Akhan Gizhem, elevando a 26 el número de personas que se benefician de esta medida, según Greenpeace.

Hasta el momento, la justicia rusa solo prolongó la detención provisional del australiano Colin Russell tres meses más, hasta el 24 de febrero.