Qatar, organizador del mundial de fútbol de 2022, está solamente empezando a entender la gravedad del problema que tiene con la explotación de inmigrantes, aseguraron los responsables del primer Índice mundial de esclavitud.

La organización no gubernamental australiana Walk Free Foundation, que esta semana presentó su índice en Londres, advirtió al país antes citado que la atención que suscita el problema crecerá a medida que se acerca el torneo.

De hecho, en su informe estimó que entre 4.000 y 4.400 personas viven como esclavos en aquél país, sobre una población de dos millones.

“Qatar tiene (además) millones de inmigrantes, que vienen principalmente del sur de Asia, trabajando en el país, y tiene un grave problema con esos inmigrantes, muchos de ellos explotados”, dijo a la AFP el director de Walk Free, Nick Grono, en una entrevista realizada el miércoles.

El problema “está suscitando mucha atención por la disputa del mundial en unos años y (el interés) no va a decaer”.

“Las autoridades, creo, están empezando a entender que hay que abordar la cuestión y esperamos que nuestro índice empiece a proporcionarles más datos e información para contribuir a una respuesta política”, agregó.

La definición de esclavitud moderna de esta fundación comprende la tradicional -ser obligado a trabajar sin cobrar- pero también la explotación salvaje, el tráfico humano o los matrimonios forzados.

El diario británico The Guardian desveló en septiembre que al menos 44 nepalíes, trabajando en condiciones similares a la esclavitud, murieron entre el 4 de junio y el 8 de agosto en las obras del mundial de Catar-2022 de fútbol.

Citando documentos de la embajada de Nepal en Qatar, el diario afirmaba que más de la mitad de las víctimas murieron por crisis cardíacas o accidentes laborales.

La Confederación internacional de sindicatos (ITUC, por sus siglas en inglés) dijo al diario que, si se mantiene el ritmo actual, al menos 4.000 obreros inmigrantes morirían antes del torneo.