El candidato presidencial del Partido Ecologista Verde (PEV), Alfredo Sfeir, aseguró que su campaña para la elección de noviembre contará con un financiamiento “ético” y que aspirará a estar en línea con la ciudadanía en busca de “una nueva sociedad, una nueva forma de hacer política, una nueva forma de hacer economía y una nueva forma de hacer lo social”.

En principio, para el economista y candidato del PEV, “este momento es histórico, en el cual la ciudadanía ha confirmado la importancia que tiene ofrecerle la país una alternativa, una alternativa diferente a este modelo neoliberal, fundamentalmente economicista, hacia un modelo mucho más armónico, equilibrado, realmente atado, enraizado en la ciudadanía y cotidianeidad de nuestro pueblo a través de esta sustentabilidad y empoderamiento ciudadano”, dijo ante la oficialización de su candidatura por parte del Servicio Electoral (Servel).

“Nosotros estamos en este momento haciendo todo tipo de líneas y de horizontes en las cuales estaremos junto a las organizaciones sociales, en las áreas urbanas y rurales del norte y sur del país, trabajando para que esta propuesta realmente sea totalmente conectada con la realidad que viven todos los chilenos, para que juntos vayamos hacia una nueva sociedad, una nueva forma de hacer política, una nueva forma de hacer economía y una nueva forma de hacer lo social”, explicó Sfeir sobre sus lineamientos de campaña.

Consultado sobre lo oneroso que puede ser una campaña política, Sfeir respondió que “nosotros hemos sido clarísimos en relación al financiamiento. Es la única campaña que ha hablado de un financiamiento ético, de un volumen máximo que de por sí es un volumen bastante alto, que fue de dos punto cinco mil millones de pesos ($2.500 millones)”.

“En estos momentos, el sistema ha dado un tope de $9 mil millones de pesos, que en nueve candidatos significa $81 mil millones de pesos; que significan casi un millón doscientos mil subsidios escolares; significan casi 500 mil pensiones; significan millones de pasajes de bus y de metro; significa pagarle a todas las familias de Chile por un mes, digamos, el consumo de pan. Por lo tanto, me parece absolutamente increíble que en nuestro país exista esta oferta de fondos cuando hay personas que ni siquiera tiene plata para comprar sus remedios; no tienen dinero suficiente para pagar sus cuentas de luz o electricidad; algunos de ellos tienen que perder sus hogares por no tener la posibilidad de pagar a los bancos. Pienso que esto no le hace ningún favor a nadie”, planteó.

Finalmente, el ecologista manifestó que “además, nosotros pensamos que la política y que el triunfo de esta campaña, no va a estar relacionada con el dinero, sino con las ideas y los horizontes. Pensamos que esa es la manera que la comunidad va a entender esto, porque empapelar al país, porque realmente, derrochar dinero en un país que necesita más que nunca una equidad y justicia en torno a lo económico, tiene un impacto muy negativo en la ciudadanía”, aseveró.