La Iglesia comprometió su ayuda en la búsqueda de hijos de desaparecidos robados durante la dictadura argentina, de 1976 a 1983, luego del pedido que hicieron al papa las Abuelas de Plaza de Mayo, informó el lunes la entidad.

“El Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina se comprometió a colaborar con la búsqueda de los nietos y nietas apropiados”, señala un comunicado de la organización humanitaria emitido tras una reunión con monseñor José María Arancedo en Buenos Aires.

Este es el primer resultado concreto obtenido por las Abuelas tras la audiencia que mantuvieron el 24 de abril pasado con Francisco en la plaza San Pedro, en la que el pontífice escuchó sus reclamos y profesó: “Cuenten conmigo”.

La entidad, que ya logró recuperar la identidad de 108 de los 500 niños que fueron robados al nacer en cárceles clandestinas, viene pidiendo a la Iglesia la apertura de sus archivos.

En particular, la entidad apunta a los archivos del Movimiento Familiar Cristiano que parece vinculado a adopciones irregulares en años del régimen militar.

“Arancedo se mostró permeable y dispuesto a colaborar con los pedidos de las Abuelas y aseguró que la Iglesia ‘ya está trabajando en el tema’”, señala el comunicado.

El presidente de la CEA se reunió en la jornada con dirigentas de la organización, entre ellas la presidenta Estela de Carlotto (82 años) que busca a su nieto nacido en el cautiverio de su madre asesinada tras dar a luz.