La explosión de un oleoducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) provocó la madrugada del domingo un aparatoso incendio, que fue controlado, en un campo despoblado de Tonanitla con un saldo de seis heridos, cuatro policías y dos bomberos, informó la empresa.
Un fuerte estallido se escuchó el domingo en la madrugada en un campo que se ubica en Tonanitla, en el estado de México, a unos 40 km de la capital, luego de que un ducto de Pemex explotó y adonde llegaron policías y agentes de protección civil.
“Los indicios apuntan a que el incidente se debió a una toma clandestina” (robo de combustible), dijo Pemex en su cuenta de Twitter.
“El suministro de crudo por el oleoducto fue suspendido de inmediato”, añadió.
Los cuatro policías municipales y dos agentes de protección resultaron heridos cuando trataron de acercarse al ducto al momento en que se registraba otro estallido.
“El error de carácter humano fue de policías y bomberos que se acercaron”, indicó de su lado Luis Felipe Puente, coordinador de Protección Civil.
“Estamos preocupados por dar una buena atención. Son elementos (los heridos) de nuestra policía municipal y protección civil”, dijo de su lado a Milenio Televisión el alcalde Tonanitla Miguel Martinez.
Imágenes de la televisión mostraron una fuerte movilización de bomberos, policías, militares y protección civil que mantienen un cinturón de seguridad.
Las imágenes mostraban el domingo en la mañana que una columna de fuego y humo se mantenía.
Las autoridades de protección civil y de Pemex dijeron que están a la espera de que se agote el combustible.