El resultado del Simce de Lectura aplicado a los segundos básicos de la región de Los Lagos evidenció que existe una brecha de 49 puntos entre los estudiantes pertenecientes a los grupos socioeconómicos más bajos y los más altos. El seremi de Educación, Carlos Muñoz, dijo que esto no es grave y que debe ser resuelto no sólo por el Estado, sino que también por las familias.
Pese a que fue una escuela pública la que encabezó el ranking de resultados en la región, los resultados de esta medición -que se aplicó en octubre de 2012 pasado por primera vez a los 2° años básicos- evidenciaron que no sólo continúan las brechas con los establecimientos privados, sino que también entre grupos sociales.
En promedio, los menores a los cuales se les midió su comprensión lectora promediaron 251 puntos a nivel regional, uno más que el promedio nacional. Para el seremi la situación no es grave pero de todas formas debe ser revertida y no sólo a través de los aparatos estatales, sino que también por medio de las propias familias.
Respecto a la forma en cómo se miden las capacidades de los estudiantes, el personero señaló que no le corresponde al Mineduc pronunciarse sobre eventuales cambios a estas evaluaciones, ya que aquello es resorte de la Agencia Nacional de la Calidad de la Educación, pese a lo cual considera que el Simce no lo es todo.
Lo que sí le compete a su Ministerio -dijo- es la modificación de los contenidos que se imparten en los recintos educativos, cambios curriculares que ya están analizando para fomentar, en este caso, una mejor comprensión lectora.
El ranking de resultados a nivel regional estableció en el primer lugar con un promedio de 310 puntos a la Escuela Rural Juan Vera Díaz de Queilén, recinto municipalizado en el cual estudian menores pertenecientes a grupos socioeconómicos bajos. Pese a esto, dentro de los primeros 15 lugares sólo aparecen otras tres escuelas públicas, una de las cuales también corresponde al segmento vulnerable.
