El frío, las lluvias y la temporada de invierno en general, provocan un aumento en el consumo de alimentos altos en calorías. Antojos que pueden traducirse en un aumento de peso, el que comúnmente varía entre 2 o 3 kilos por mes, y ante este escenario, se hace necesaria la toma de medidas oportunas para evitar un desagradable encuentro con la balanza.

Con las bajas temperaturas se incrementa el consumo de sopaipillas, empanadas, calzones rotos y carbohidratos en general, las comidas calientes y con un alto número de calorías se transforman en el menú preferido de más del 80% de los chilenos.

Lo anterior, más que una medida antojadiza, tiene directa relación con la necesidad que tiene nuestro cuerpo de aumentar su temperatura, efecto conocido científicamente como Termogénesis.

Si bien, esta conducta puede ser una medida necesaria, no hay que olvidar que durante esta temporada un alto número de personas abandona la actividad física, sobre todo cuando la practican al aire libre, por lo que facilita el aumento de peso llegando a superar los dos o tres kilos por mes.

La nutricionista de la Universidad Iberoamericana de Ciencias y Tecnología, Gloria Pizzaro, asegura que el consumo de alimentos con moderación y de manera fraccionaria no es dañino en ninguna etapa del año, sino que el problema radica cuando se cae en excesos por cubrir la necesidad calórica.

Al respecto, la especialista entrega algunas precisiones y recomendaciones:

Consumo de sopaipillas y empanadas:

-Ciertamente durante la época de frio aumenta el consumo de comidas con un alto número de calorías como las sopaipillas y empanadas, por ejemplo. La sopaipilla, sin pasar, tiene aproximadamente 130 calorías y una pasada con chancaca 190 calorías.

- Una empanada entre 300 a 400 calorías, consumirlas hechas en casa con aceite, en forma eventual y con moderación, no es problema, pero depende de la persona y la cantidad.

Consumo de sopas, consomés antes del plato principal:

-Depende de la preparación y del acompañamiento, si son con carnes magras (sin grasas) o aves descueradas antes de cocinar y con verduras, deben ser consideradas como parte del almuerzo. Se recomienda consumir antes de la cazuela una ensalada surtida, y la cazuela como plato de fondo.

-El consomé solo, no tiene aporte y se sugiere en días fríos, previo al plato de fondo.

Por un invierno saludable:

-Es importante considerar que aunque sea invierno, no debemos de dejar de consumir 3 frutas diarias diferentes (en ayuna, antes de almuerzo y antes de cena para mejorar la higiene de evacuación por su aporte sus vitaminas, sales minerales y fibra).

- Tampoco debemos dejar de consumir ensaladas, idealmente 5 al día, pero puede ser una quimioterapia natural consumir 10 variedades diarias, considerando 5 en almuerzo y 5 en la cena, entre cocidas y crudas, aliñadas con aceite de oliva o canola.

- Considerar las 4 comidas básicas (desayuno, almuerzo, onces y cena) en porciones moderadas, más colaciones (frutas, semillas como nuez, almendra, avellana pistacho o maní sin sal ni azúcar en porciones pequeñas).