Un día después de la gala de los Óscar en Hollywood, los críticos atacaron el lunes al anfitrión Seth MacFarlane por sus “bufonadas cruelmente sexistas” y por hacerse eco de “ofensivos” estereotipos judíos.
Otros dijeron que el creador de “Padre de familia”, a quien los organizadores de los Óscar convocaron como anfitrión con el fin de atraer a un público joven, fue aburrido; mientras el sitio web satírico The Onion debió disculparse por un insultante tuit sobre la actriz nominada más joven de la historia.
“Bien, pues no funcionó”, escribió el crítico de televisión del diario local Los Angeles Times, en una nota a toda página sobre el show de tres horas de la 85a entrega de los Premios de la Academia el domingo.
“A pesar de los valientes esfuerzos de Adele, Barbra Streisand y de un sorprendentemente ingenioso Daniel Day-Lewis, (el espectáculo) fue largo, autocomplaciente y aburrido, incluso para los estándares de aburrimiento del programa”, escribió.
En efecto, el programa mundialmente televisado abrió con un segmento sobre si MacFarlane haría o no un buen trabajo como anfitrión de los Óscar: la estrella de Star Trek, William Shatner, apareció en video desde el siglo XXIII diciéndole lo mal que le había ido.
Los críticos dijeron que esta sección fue larga y demasiado autorreferencial. También atacaron el primer musical: el número “We Saw Your Boobs”, en el que MacFarlane hizo un recuento de las veces que las actrices han mostrado sus senos en pantalla.
“Ver los Óscar anoche significaba sentarse a pasar por una serie de bufonadas cruelmente sexistas dirigidas por un sucio y autocomplaciente Seth MacFarlane”, escribió la biblia de la cultura, el New Yorker.
“Eso podía haber sido ya bastante aburrido. Pero la misoginia de la noche involucró una hostilidad específica hacia las mujeres en su lugar de trabajo. Fue poco agradable y amargo”.
También un segmento con el oso de peluche Ted, protagonista del filme homónimo de McFarlane, provocó severas críticas. El osito apareció junto a su colega de reparto Mark Wahlberg e hizo una serie de chistes sobre tener sexo con miembros de la audiencia y una orgía que tendría lugar en la mansión de Jack Nicholson.
Luego bromeó sobre el supuesto control de los judíos en la industria del cine estadounidense al decir que su verdadero nombre es Theodore Shapiro. Luego añadió: “Quiero donar dinero a Israel y continuar trabajando en Hollywood por siempre”.
El grupo judío Liga Antidifamación (ADL) criticó estos chistes al considerarlos “ofensivos y ni remotamente divertidos”, en un comunicado del director de la ADL en Estados Unidos, Abraham H. Foxman.
En otro episodio también vinculado con los Óscar, el sitio web con noticias satíricas The Onion se disculpó por usar una palabra sexualmente ofensiva al describir a Quvenzhané Wallis, la niña de nueve años nominada a Mejor actriz por “Bestias del sur salvaje”, un papel que rodó cuando tenía cinco.
“De parte de The Onion, ofrezco mis disculpas personales a Quvenzhané Wallis y a la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas por el tuit que circuló anoche durante los Óscar”, escribió el jefe de la web, Steve Hannah.
“Fue grosero y ofensivo, sin mencionar inconsistente con el compromiso de The Onion hacia la parodia y la sátira”, escribió en su página de Facebook.