En lo que puede considerarse un nuevo revés para el Ministerio Público, la justicia absolvió a siete de los ocho acusados por el colapso del edificio Alto Río. Para el Tribunal Oral en lo Penal de Concepción las pruebas exhibidas durante el juicio sólo permitieron acreditar la responsabilidad del ingeniero calculista René Petinelli. La resolución fue duramente criticada por las víctimas, mientras que la Fiscalía esperará la sentencia para decidir un recurso de nulidad.

El veredicto de los jueces Nancy Vargas, Adolfo Cisterna y Silvia Mutizábal entregado en la copada Sala 3 del juzgado penquista, fue recibido con rabia por las víctimas y frustración por parte de la Fiscalía, que acusó, luego de dos años de investigación, a los principales involucrados en la construcción del colapsado Alto Río.

Poco sirvió al Ministerio Público el peritaje de 140 millones de pesos realizado por el Idiem, que era la principal prueba para imputar a los gerentes de Sovil y sus asesores por las ocho muertes a causa del desplome del edificio así como las lesiones graves a otros siete residentes.

Según señaló en su veredicto el tribunal, leído por la magistrada Vargas, los antecedentes sólo pudieron probar la culpabilidad del calculista, mientras que de los otros siete acusados se impuso la duda razonable por sobre la convicción para condenar.

En el dictamen, se detalló los errores del ingeniero Petinelli y que habrían desencadenado la caída del edificio Alto Río.

Para los afectados, lo resuelto por el Tribunal Oral sólo confirma que en el país no existe la justicia. Así lo expresó Verónica Riquelme, quien sufrió fracturas en su columna, dejándola con una paraplejia.

Mónica Acevedo, madre de José Luis León, la última víctima fatal rescatada de entre las ruinas del inmueble, estaba desconsolada.

Escuetas fueron las declaraciones del único condenado.

Pedro Ortigosa, el ingeniero que determinó la calificación del suelo, otro aspecto en discusión durante el juicio, señaló que no podía explicar que sólo una persona fuera responsabilizada por la tragedia.

Desde la defensa, Alejandro Espinoza, representante de seis de los acusados, adelantó que analizará acciones legales contra algunos de los querellantes que acusaron a sus clientes de homicidio.

A la salida del juzgado, los abogados querellantes intentaban explicar la resolución, subrayando en que existe la posibilidad de un recurso de nulidad. Renato Fuentealba insistió en que no todo está perdido para las víctimas.

El fiscal regional Julio Contardo, junto con adelantar que estudiarán pedir la nulidad del fallo una vez que lo conozcan, admitió que no compartían el veredicto.

La lectura de la sentencia quedó fijada para el 5 de diciembre. En ella los jueces entregarán los fundamentos de la absolución de los gerentes de Socovil, Juan Ignacio Ortigosa, Felipe Parra y Ricardo Baeza, así como de los directores y jefes de obra, Mario Valeria, Héctor Torres y José Luis Paredes, además del ingeniero Pedro Ortigosa.

El condenado Petinelli enfrenta una pena de 800 días de cárcel por ocho cuasidelitos de homicidio y siete cuasidelitos de lesiones graves.