Más de 150 personas según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), más de 200 según un jefe rebelde sirio, murieron este jueves en el ataque con blindados y helicópteros de la localidad de Treimsa, centro de Siria, por las fuerzas gubernamentales.

“Las tropas del Gobierno bombardearon (Treimsa) con tanques y helicópteros”, indicó por teléfono a la AFP el presidente del OSDH, Rami Abdel Rahman.

El OSDH estimó que el número de muertos es superior a 150 y en total son más de 200 los registrados este jueves en el país.

“Teniendo el cuenta la pequeña talla de la ciudad, puede ser la mayor matanza cometida desde el principio de la revolución”, comentó Abdel Rahmane.

Un jefe rebelde, Abu Mohamad es su nombre de guerra, comandante de un grupo de combatientes rebeldes basado no lejos de allí, más al norte, aseguró a la AFP la noche del jueves al viernes que el ataque causó “más de 200 muertos”.

Según un militante residente en la provincia, el balance es particularmente grave porque las fuerzas gubernamentales bombardearon una mezquita donde se habían refugiado numerosos vecinos. Treimsa “ahora está vacía. Todo el mundo está muerto o huido”, afirmó a la AFP este militante que se presentó como Abu Ghazi, en un mensaje electrónico.

“Unos 30 vehículos del Ejército rodearon totalmente el pueblo. No había manera de salir. Quien intentaba huir por los campos era abatido”, contó otro militante, que djo llamarse Ibrahim. “Después del bombardeo, el Ejército entró (en Treimsa) con armas ligeras, seguidos de los (milicianos prorrégimen) Shabiha con cuchillos”, añadió.

Según la agencia oficial siria SANA, se registraron choques entre el Ejército y un “grupo terrorista” en la localidad. Sin facilitar balance, SANA afirmó que se produjeron “muchas bajas en las filas de los terroristas” y tres soldados murieron.