La instalación de la Termoeléctrica BocaMina II en Coronel ha generado resistencia por parte de los sindicatos de pescadores y de recolectoras de algas, que acusan la destrucción de los recursos marinos. A lo anterior, se sumó un video que evidencia el daño que provoca el funcionamiento de la empresa en la zona.

Según han reclamado los habitantes de la caleta Lo Rojas, la puesta en marcha a plena capacidad del complejo termoeléctrico de la empresa Endesa, aumentará la temperatura del mar, algo que terminará matando la fauna, y en consecuencia, dejando sin los recursos marinos que proveen de ingresos a los pescadores artesanales y recolectores.

Además, las personas dedicadas a la recolección de algas en las playas reclaman que la empresa les cerró el paso al borde costero, por lo que les tienen sin poder obtener luga, cochayuyo o el luche, que posteriormente venden para consumo humano, o para la industria de los cosméticos.

Según denuncian en una grabación filtrada por trabajadores de la empresa y publicada en la página de la red social Facebook de la Caleta Lo Rojas, la succión de agua de las centrales extrae peces y otros recursos, los que terminan pudriéndose en tambores al interior de las termoeléctricas. Además, el agua es devuelta tibia a la bahía, lo que termina de matar a las especies al verse en un medio con una temperatura mayor a la natural.

http://youtu.be/bJOTJLZsPcA

Ante las denuncias, el Ministerio Público inició una investigación hace un par de semanas ordenando a la PDI de Santiago y Concepción la realización de peritajes, ante una “eventual contaminación ambiental, relativa a la afectación de recursos hidrobiológicos en la zona de Coronel y su posible consecuencia en personas, animales o plantas”.

A esta investigación se sumó la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales (Confepach) con la presentación de una querella en la que van a presentar videos y fotos que probarían el daño que la marcha blanca de Bocamina II está provocando en el borde costero.

Como antecedente, la Corte Suprema el sábado pasado ordenó a Endesa un Estudio de Impacto Ambiental para su idea de ampliar su producción de energía en 20 megawats, dejando paralizada la ampliación de Bocamina II hasta que presente dicho estudio.

Ante los reclamos de los vecinos, Endesa ha planteado la realización de estudios en la bahía de Coronel para evaluar el impacto, capacitación para los pescadores y “programas que mejoren la sustentabilidad de los recursos pesqueros en la zona, según los resultados que se obtengan”.

Incluso, la empresa anunció que se encuentra evaluando un proyecto “que permitirá a la población tener un acceso expedito al borde costero”, junto con buscar soluciones a los casos pendientes de erradicación para los vecinos de población Aroldo Figueroa y del sector del Amengual de Colonia Alto, además de mejoramientos para las viviendas de la población El Esfuerzo.