Las presiones militares sobre los talibanes podrían conducir a “oportunidades reales” para conversaciones de paz con los líderes insurgentes de Afganistán en un año, afirmó el sábado en Singapur el secretario saliente de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates.

“Mi opinión personal es que las oportunidades políticas surgirán de la presión militar”, afirmó Gates durante una conferencia sobre seguridad en Singapur, como parte de una gira final antes de abandonar el cargo, a fines de este mes.

“La posibilidad de algún tipo de conversaciones políticas y de una reconciliación podría ser suficientemente robusta para ofrecer alguna esperanza de progresos”, dijo el jefe del Pentágono.

Sin embargo, Gates subrayó que para que los talibanes tengan algún papel político en Afganistán, los insurgentes deben reconocer que no ganarán la campaña militar contra Estados Unidos y sus aliados.

“Creo que la opinión generalmente aceptada es que fundamentalmente todos los conflictos de este tipo terminan a la larga con algún tipo de acuerdo político”, afirmó Gates.

“Pero la realidad, en mi opinión, es que las probabilidades de un acuerdo político no serán reales hasta que los talibanes y otros adversarios, los adversarios afganos, comiencen a comprender que no pueden ganar militarmente”, insistió.

El ministro de Defensa estadounidense sostuvo que las fuerzas de su país habían expulsado a los talibanes de sus bastiones en el sur y que había cada vez más pruebas de que los rebeldes estaban sufriendo derrotas militares.

“Si podemos mantener esos éxitos, si podemos expandir aún más la burbuja de seguridad (…), quizás este invierno (boreal), la posibilidad de algún tipo de conversaciones políticas, o de reconciliación, podría ser suficientemente fuerte para ofrecer alguna esperanza de progreso”, dijo Gates.

El debilitamiento de los insurgentes también significaría que los países vecinos tendrían mayores incentivos para fomentar un fin negociado del conflicto, sostuvo.

“Creo que bajo esas circunstancias, podemos ver oportunidades reales en el curso del año próximo”, dijo Gates.

Después de partir de Singapur, Gates asistirá en Bruselas a una conferencia de los ministros de Defensa de la OTAN, durante la cual se espera que la campaña aérea en Libia y la guerra en Afganistán ocupen los primeros puntos de la agenda.

El presidente Barack Obama fijó el mes próximo como la fecha para comenzar la retirada de las tropas norteamericanas de Afganistán, y el fin del año 2014 como la época en que las fuerzas de Estados Unidos y de la OTAN deberán transferir las responsabilidades de la seguridad a las autoridades afganas.

Hace casi diez años que las fuerzas dirigidas por Estados Unidos invadieron Afganistán para derrocar al régimen talibán, que había dado refugio al líder de Al Qaida, Osama bin Laden.

Bin Laden, que organizó los atentados del 11 de septiembre de 2001 que mataron a casi 3.000 personas en Estados Unidos, murió en mayo pasado durante un ataque de comandos norteamericanos contra su escondite en Pakistán.