Holanda y Brasil sellaron un empate sin goles en partido amistoso disputado este sábado que dejó sabor a derrota para más de 36.000 hinchas auriverdes deseosos de reponerse reponerse de la última derrota sufrida en el Mundial de Sudáfrica-2010.

El gol no llegó a lo largo de los 90 minutos pero oportunidades no faltaron para el once que dirige Mano Menezes, compuesto por una nueva generación de fútbolistas encabezada por el atacante Neymar.

“Fue un juego regular”, zanjó el técnico en conferencia de prensa, al término del encuentro. Sin embargo, su balance general fue más optimista.

“Es nuestro tercer encuentro con una selección de punta y notamos una evolución. No me puedo quejar de ninguno de nuestros jugadores”, comentó el estratega.

“Este es el inicio de una preparación, no es fácil, pero todos los jugadores estamos concientes de eso”, complementó el capitán Lucio, que jugó su partido número 100 con la camiseta auriverde.

En la primera mitad, el conjunto brasileño amenazó primero a los 12 minutos, con un remate de Ramires que perforó el arco de Tim Krul, pero fue anulado por el juez de línea.

Un minuto después, Neymar recibió el balón en la entrada del área, pero en vez de rematar intentó gambetear a la defensa naranja sin éxito, en una de sus tantas incursiones ofensivas.

“Nunca había visto personalmente jugar a Neymar, es un excelente jugador, como muchos brasileños”, comentó el técnico holandés Bert van Marwijk, quien ya comparó al ‘crack’ paulista con el argentino Leonel Messi.

La figura del conjunto naranja -aunque este sábado jugó todo de blanco- en la primera mitad fue el delantero Ibrahim Afellay, del FC Barcelona, que puso en apuros a la defensa auriverde en varias oportunidades.

A los 21, el atacante quedó solo frente a Julio César que controló magistralmente. Una vez más, a los 22, llegaba de nuevo pero Lucio logró desarmarlo. Y a los 37, otra vez, Afellay con un proyectil al arco que el portero ‘canarinho’ contraló sin problemas.

“Teníamos que trabajar mejor la bola y tener cuidado con el contrataque”, comentó Fred al término de la primera mitad.

Brasil salió del intervalo determinado a conseguir el gol, y desde el primer minuto comenzó una férrea presión.

“Regresamos muy bien y vimos a una Holanda que no pudo llegar y creamos un número mucho más grande de oportunidades de gol”, resaltó Mano.

De hecho, a pocos minutos del pitazo, a los 46, Neymar, asistido por Elano, remató al arco y Krul logró desviar el tiro. Poco después, Robinho la mandaba por encima del arco.

Así el local siguió presionando en los siguientes minutos, dominando las acciones, pero sin conseguir el gol porque, entre otras cosas, Tim Krul se había convertido en una muralla.

A los 57 zanjó un tiro de larga distancia de Lucio, a los 59 paró un remate de Robinho y a los 68 otro de Neymar. El ataque que caracterizó a los holandeses en el primer tiempo desapareció en la segunda mitad.

Brasil también desperdició varias chances para anotar, la primera de las cuales a los 56, cuando Fred malogró un centro espectacular de Neymar. Y luego a los 59, cuando el mismo Fred no pudo anotar de contragolpe a pocos centímetros del arco.

En los minutos finales, ambas selecciones bajaron el ritmo y el empate ya era un hecho. Después del pitazo final, un fuerte abucheo despidió al once ‘canarinho’