Unas 23 mujeres trabajadoras de la Fundación Integra iniciaron hoy lunes una huelga de hambre, a raíz de una serie de peticiones incumplidas, respecto a mejoras laborales.

Las funcionarias reclaman bonos y los mismos beneficios que tienen los empleados públicos, para lo que han adoptado la medida de fuerza, instalándose a un costado de la catedral de la capital del Maule, frente a la Plaza de Armas.

La movilización cuanta con la autorización del obispo de la Diócesis de Talca, monseñor Horacio Valenzuela Abarca, siempre con la vigilancia de personal de Carabineros.