Los mapuche internados en el Hospital Regional de Concepción y los detenidos en la cárcel El Manzano están dispuestos a sentarse en una mesa de diálogo con el Gobierno, pero no a bajar la huelga de hambre mientras no exista una respuesta definitiva frente a sus demandas.

La desesperación comienza a reinar entre los 3 comuneros internados en el recinto asistencial, que dicen sentirse bien pese a su debilidad y que exigen ser llevados de regreso a la cárcel El Manzano, junto a los otros dos huelguistas detenidos en ese penal

Jonathan Huillical, Ramón Llanquileo y José Huenuche, a través de la esposa de este último, Millaray Garrido, afirman que el Seremi de Salud, Mario Fernández, se comprometió con ellos a compensar sus estados de salud y retornarlos, pero aún no cumple, y para peor, ahora les advierte de alimentarlos por la fuerza si no acceden a recibir un mínimo de proteínas.

Sobre la posibilidad de sentarse en una mesa de diálogo con el Gobierno y con el arzobispo de Concepción, Ricardo Ezzati, la esposa de José Huenuche indicó que los comuneros están dispuestos a conversar, pero no a dejar la huelga mientras no exista solución definitiva.

Se desconoce por ahora el momento que eligirá el arzobispo Ezzati para reunirse con los comuneros en huelga en el hospital y en la cárcel de Concepción.

Desde inicios de esta semana se ha especulado con el traslado de los tres comuneros que estan internados en el Hospital Regional de Concepcion hasta el Hospital de Tome, por reunir este mejores condiciones, pero los familiares de los huelguistas advirtieron que si ello ocurre echaran por la borda cualquier intento de dialogo con el gobierno.