Los alcaldes de Talca y Rancagua criticaron las políticas de emergencias y el plan “Manos a la Obra” del Gobierno en las zonas afectadas por el terremoto del 27 de febrero pasado.

El edil de Talca, Juan Castro, precisó que todavía la ciudad se encuentra en una etapa de emergencia, ya que se han instalado un 50% de las viviendas y se necesitan construir 1.300 casas más.

En este contexto, el alcalde talquino aseguró estar satisfecho con la gente que presta este tipo de servicios laborales.

Según explicó Juan Castro, son 4.500 cupos para la Región del Maule y 750 puestos para la ciudad de Talca creados por el cuerpo militar de la zona.

Según confirmó el edil, estas personas trabajan por el sueldo mínimo, contratados bajo las actuales leyes laborales.

En tanto, Eduardo Soto, alcalde de Rancagua, manifestó que todavía la emergencia no se ha acabado, pero esto finalizará cuando las personas que están en mediaguas pasen a viviendas definitivas.

Soto precisó que en 10 días más deberían estar definidas la mayoría de los casos de mayor complejidad. Además, en los próximos días se comenzará a entregar material de construcción a las viviendas que resultaron dañadas.

La principal crítica del alcalde de Rancagua es al programa Manos a la Obra. Soto, quien no responsabilizó directamente al Gobierno, sostuvo que la falta de stock de material es una de las falencias más relevantes.

El edil precisó que actualmente se encuentran 250 familias viviendo en carpas, de las cuales 160 se irán en los próximos días a una villa de emergencia en el sector nororiente de Rancagua.

La vocera de Gobierno, Ena von Baer, en tanto, sostuvo que el Presidente ha ido cumpliendo cada uno de las metas propuestas dentro de la emergencia.

Para la portavoz la principal tarea del Estado dentro de los 4 años de mandato del presidente Sebastián Piñera es trabajar en la reconstrucción del país.