Señalando que en los Bancos nadie tiene nada claro sobre que ocurrirá con las anunciadas prórrogas de los créditos hipotecarios y de consumos, decenas de auditores de La Radio expresan su molestia con estas entidades financieras.

Imagen: handez.L.A. / skyscrapercity.com
Es el caso de Juan Carlos Pino quien temprano se acercó al Banco Estado, donde consultó sobre la situación de su crédito hipotecario y la factibilidad de aplazarlo en 6 meses, tal como lo han anunciado las casas bancarias a través de decenas de anuncios publicitarios donde según Pino, dan a entender que la intención es ayudar a las familias de las regiones afectadas.
Por ello el cliente del banco del estado, al dialogar con su ejecutiva, le habría dado como respuesta que aún la casa bancaria no tendría claro, si las 6 cuotas que él sí puede aplazar, se trasladarán al final de sus crédito, es decir, en 12 años más o se trasformará en un crédito de consumo, pero siempre con intereses.
Ante este escenario Pino realizó un llamado a las personas a no confiar en este supuesto buen propósito de las instituciones financieras, exhortando a cancelar de forma regular sus dividendos.
A su vez, un escándalo ha provocado en clientes del Banco BCI que mantenían créditos de consumo, ya que la entidad financiera automáticamente suspendió el cobro del mes de marzo, sumándolo como cuota al final del crédito, pero eso sí, agregando los intereses que esto significa.
Es el caso de uno de los clientes de BCI quién reclama la falta de criterio y de respeto de la institución, ya que a ellos nunca se les consultó sobre la interrupción del pago en Marzo, por lo cual al ver que de su cuenta corriente no se descontó el dinero, se acercó al banco percatándose que la cuota de $ 350 mil había pasado a la cuota 37 con un total a pagar cercano a los $ 580 mil, esto se traduce en $230 mil más que pagará.
Dineros, que advierte el molesto auditor, no está dispuesto a pagar.
Cabe señalar que una vez entregada esta información por Radio Bío-Bío, varios fueron los llamados donde se denunció esta situación, reflejando así la molestia de los habitantes contra las casas bancarias por no llevar a cabo una real ayuda.