La educación en Chile es un tema candente y existen muchas tareas pendientes que realizar en sólo 4 años, relacionadas con la evaluación de los profesores públicos, que ya anunciaron un paro para el mes de marzo, y la mejoración de la prueba Simce, entre otros. Frente a esto, recién nombrado ministro de Educación del nuevo gobierno, Joaquín Lavín declaró estar consciente que Educación es un tema complejo, pues es el “gran nudo a resolver a largo plazo”.

Joaquín Lavin / Piñera en Flickr

Joaquín Lavin / Piñera en Flickr

Frente al conflicto de intereses que genera su designación tomando en cuenta su vinculación con la Universidad del Desarrollo, Lavín señaló que “como ministro de Educación no debe tener ninguna relación con esta casa de estudios”, y por lo tanto anunció su desvinculación total de la Universidad del Desarrollo de la cual era socio fundador, declarando que “no quiero tener ninguna relación con la Universidad del Desarrollo” .

Según Lavín, tiene claros los riesgos políticos de ser ministro de Educación, “y es en ésta área en donde hay que hacer cambios importantes con firmeza, fuerza y carácter, y asumo lo que eso significa. Yo quiero ser el ministro de educación de las familias que tienen sus hijos en la educación pública, y contar con los profesores(…) Probablemente tengamos que invertir más recursos, pero atados a mejorías concretas en calidad.”