Un alto nivel de vitamina D en la sangre parece estar asociado con una reducción del riesgo de cáncer al colon, según un estudio comparativo realizado sobre más de medio millón de europeos y que publica este viernes el British Medical Journal (BMJ).
Las personas con un alto nivel de vitamina D en la sangre corren un riesgo 40% inferior de desarrollar un cáncer colorrectal que los que lo tienen bajo.
Esta vitamina, que el cuerpo fabrica cuando se expone al sol, pero que puede también provenir de ciertos alimentos, desempeña un papel en la resistencia ósea al favorecer la fijación del calcio.
Estudios previos habían sugerido un vínculo entre la vitamina D y el cáncer colorrectal, pero no se llegó a conclusiones debido a la escasa información sobre las poblaciones europeas.
El presente estudio, realizado de 1992 a 1998 y basado en el proyecto EPIC (European Prospective Investigation into Cancer), sobre más de 520.000 personas de 10 países de Europa occidental (Dinamarca, Francia, Grecia, Alemania, Italia, Países Bajos, Noruega, España, Suecia y Reino Unido), fue coordinado por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), la agencia de la OMS para el cáncer, con sede en Lyon (Francia).
Durante el seguimiento de los participantes se diagnosticó 1248 casos de cáncer colorrectal y los pacientes fueron comparados a un número equivalente de individuos sanos.
Los autores del estudio señalan que aún queda por aclarar si una concentración elevada de vitamina D en la sangre debido a suplementos dietéticos o a alimentos enriquecidos, es mejor solución que lograr este resultado a través de una dieta equilibrada combinada con una exposición regular y moderada a la luz solar.
Los ensayos realizados hasta ahora no han permitido responder a la pregunta. Así, antes de recomendar que se tome suplementos se deberá realizar otros estudios para evaluar si un aumento de la concentración de la vitamina D en la sangre reduce realmente el riesgo de cáncer y esto, sin efectos secundarios graves, indicaron.
Por el momento, los consejos para reducir el riesgo frente a este tipo de cáncer es dejar de fumar, aumentar la actividad física, perder peso y afinar la cintura, así como limitar el consumo del alcohol y carnes rojas.