Estados Unidos está decidido a “encontrar y solucionar” los problemas de seguridad que condujeron la semana pasada al fallido intento de hacer explotar un avión de línea, dijo este miércoles la secretaria de Seguridad Interior norteamericana, Janet Napolitano.
El desbaratado ataque a un avión de Northwest Airlines el día de Navidad “es una fuerte ilustración de que los terroristas harán mucho para tratar de superar las medidas de seguridad que fueron puestas en marcha el 11 de septiembre de 2001″, escribió Napolitano en una columna del diario USA Today.
El sospechoso nigeriano, Umar Faruk Abdulmutallab, presuntamente trabajó con Al Qaida en el intento del viernes de hacer estallar un avión en ruta de Amsterdam a Detroit encendiendo explosivos ocultos en su ropa interior.
“El presidente Obama ha ordenado, y el departamento de Seguridad Interior y nuestros compañeros en el gobierno federal hemos comenzado a revisar de inmediato nuestra lista de vigilancia y los procedimientos de chequeo que han estado en funcionamiento durante años para determinar por qué este individuo tuvo permitido abordar el vuelo en Amsterdam, y por qué el chequeo del exterior no descubrió los explosivos ocultos en su cuerpo”, escribió Napolitano.
“Si bien hemos tomado rápidamente nuevas medidas de seguridad en los aeropuertos del país y del mundo después del incidente de la semana pasada, nuestro sistema de seguridad no debería haber permitido jamás que este individuo tomara un lugar en un avión con destino a Estados Unidos”, agregó.