El depuesto presidente hondureño, Manuel Zelaya, afirmó este miércoles que la Organización de Estados Americanos (OEA) debe darle un “tiempo determinado” al diálogo entre él y el gobierno de facto de Roberto Micheletti, que se niega a restituirlo en el poder.

Fuente: Agencia AFP.

“La posición de la OEA es correcta, pero debe darle más tiempo determinado, específico, a este proceso de diálogo, que se ha convertido realmente en un arma de boicot y de obstrucción de parte del régimen de facto”, afirmó el mandatario en rueda de prensa en la embajada de Brasil, donde está refugiado desde hace un mes.

La OEA pidió este miércoles un esfuerzo para superar el estancamiento del diálogo, pero Estados Unidos y otros países endurecieron el tono al pedir al gobierno de facto mayor compromiso y evitar tácticas dilatorias.

Comisiones de ambas partes se reunían por separado en un hotel de la capital, pese a que el diálogo se encontraba entrampado porque Micheletti rehúsa devolver la presidencia a Zelaya.

El diálogo que transcurre desde el 7 de octubre con el auspicio de la OEA “no está dando los resultados que se esperaban”, lamentó Zelaya.

Zelaya sostiene que su restitución es asunto político por lo que la decisión corresponde al Congreso, pero los de Micheletti dicen que deben consultar antes a la Corte Suprema, que acusa a Zelaya de 18 delitos como traición a la patria por intentar cambiar la Constitución con el supuesto fin de reelegirse.

Zelaya dijo que quiere “poner en alerta a la comunidad internacional de que el estado totalitario está en la colocación de equipos de sonido de alta potencia que se escuchaban a 20 cuadras a la redonda” de la embajada de Brasil para no dejarlo dormir a él ni a sus acompañantes.

El mandatario cumplió este miércoles un mes refugiado en la embajada, acompañado de medio centenar de personas, que está sitiada por militares, quienes han colocado en la noche potentes reflectores de luces y parlantes que, según los zelayistas, emiten aullidos de animales y música estridente.