En libertad, pero formalizados por 4 delitos quedaron los dueños de la corredora de bolsa Alfa, acusada de causar pérdidas por 60 millones de dólares a la banca privada.
El informe es de Érik López, de Radio Bío-Bío Santiago.
Se trata de Alejandro Contin Naranjo y su hijo menor Antonio Contin González, quienes desde ahora enfrentan cargos por quiebra fraudulenta, entrega de información falsa a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), uso malicioso de custodia de clientes y obtención fraudulenta de créditos.
La decisión la adoptó el cuarto Juzgado de Garantía de la capital, que además no acogió la petición de prisión preventiva para ambos, teniendo en cuenta lo bajo de la pena que pueden enfrentar los imputados y la colaboración que han prestado a la causa.
Uno de los abogados que los representan, Leonardo Bataglia, se manifestó optimista en lograr la absolución de sus clientes.
La corredora quedó debiendo, tras su quiebra en junio del 2008, 22 mil 600 millones de pesos a distintos bancos.
El fiscal que investiga los hechos, Luís Hinostroza, insistió que lo importante es acreditar las triangulaciones que realizaban con empresas de papel para esconder la insolvencia de la corredora.
Tanto los abogados de los bancos, como la fiscalía, dijeron que revisarán los antecedentes antes de decidir si apelan para lograr la prisión de los imputados.
Alejandro y Antonio Contin, por estos hechos, recibieron multas por 250 millones de pesos de parte de la SVS.