El senador independiente Alejandro Guillier valoró este martes el retiro por parte del Ejecutivo del proyecto de ley corta para permitir la votación de las miles de personas que registraron cambios arbitrarios de domicilio electoral.

“Era un desastre, yo estaba en contra. Lo dije ayer en mi intervención”, aseguró el parlamentario durante una actividad en Calama en apoyo a la candidata Angelique Araya.

El proyecto fijaba la duplicación del padrón electoral para que las personas afectadas eligieran votar en la mesa original o en la correspondiente en el nuevo domicilio.

Para Guillier, quien figura como una de las cartas presidenciales de la Nueva Mayoría, “esto es un bochorno que no tiene precedentes” y la situación “poco clara” en la que se encuentra cerca de medio millón de personas “distorsiona absolutamente los resultados”.

“Lo que se estaba proponiendo era, a mi juicio, inconstitucional”, manifestó, ya que la posibilidad de que una persona eligiera dónde votar “le quita transparencia al proceso electoral”.

Por ello, dejó ver que se podría dar una serie de situaciones irregulares bajo el escenario que planteaba la iniciativa del Gobierno.

“No puede ser que una persona elija dónde vota porque pueden darle la instrucción ‘miren, si usted está en esta situación vote en tal lugar porque ahí la pelea es más estrecha, en cambio en este otro lado ya ganamos’. Imagínate después, vienen las impugnaciones; 20 días para revisar el voto de 500.000 chilenos. Eso habría sido imposible”, subrayó.

Remató al respecto que “la embarrá ya está” y espera que “salgamos lo mejor posible el domingo y luego que esta vez corran cabezas. No podemos seguir con errores tras errores y que no se cobran las responsabilidades”.