Un estudio científico, desarrollado por la Universidad de Sao Paulo (Brasil), determinó cómo es la estructura cerebral de una persona transgénero. Tras haber estudiado las características de 80 individuos.

En la investigación, publicada en la revista académicaScientific Reports, se trabajó con 20 mujeres trans que nunca utilizaron hormonas, 20 mujeres trans que las utilizan regularmente, 20 hombres cisgénero y 20 mujeres de esta última condición.

“Cisgénero, habitualmente, es el vocablo empleado para designar a las personas que no exhiben incongruencia entre el sexo de nacimiento y el género con el cual se identifican. En tanto, el término transgénero se emplea comúnmente para designar a las personas que presentan incongruencia entre el sexo de nacimiento y el género con el cual se identifican”, explicaron.

Durante la fase experimental, los investigadores realizaron un análisis estructural para investigar diferencia en los volúmenes de sustancia blanca (fibras nerviosas) y gris (sistema nervioso central), con imágenes de resonancia en los cerebros de todos los sujetos de estudio.

Los primeros resultados indicaron que las mujeres trans poseen un tamaño reducido en un área cerebral llamada Ínsula, en los dos hemisferios cerebrales.

Scientic Reports
Scientic Reports

“Esa zona es sumamente importante, entre otros aspectos, para la percepción del propio cuerpo. El tamaño de la corteza insular no apareció disminuido con relación a los varones cisgénero, pero sí con respecto a las mujeres cis”, destacaron los profesionales.

Sin embargo, los científicos determinaron que estas características no son significativas ni determinantes para diferenciar una persona “cis” de otra “trans”.

“Es importante recordar que no existe un cerebro típicamente femenino o masculino. Lo que aparecen son ligeras diferencias estructurales, mucho más sutiles que la diferencia genital, por ejemplo. Y existe también una gran variación individual en las estructuras cerebrales”, aclararon.

Geraldo Busatto, codirector del estudio, determinó que este puede ser un punto de inicio para comenzar a determinar en qué punto de la vida se comienzan a reflejar las diferencias entre estos dos grupos.

“Estamos viendo que las personas trans tienen características que las acercan al género con el cual se identifican y sus cerebros tienen particularidades, lo que sugiere que las diferencias empiezan a ocurrir durante el período gestacional”, explicó.

Cabe señalar que este fue el primer estudio que logró determinar diferencia cerebrales en personas transgénero, para dar una explicación científica a su condición.

“Observamos que existen especificidades cerebrales en los individuos trans, lo que constituye un hallazgo importante, frente a la idea de ideología de género. Va quedando demostrado que no se trata de una cuestión de práctica ideológica. De acuerdo con lo que constatamos mediante imágenes por resonancia magnética, es detectable una base estructural”, concluyeron.