José Murillo, representante nacional del mundo laico en su estadía en Osorno, cuestionó el rol de los actuales detentores del poder. Conservar, ejercer y abusar del poder han sido problemas sociales históricos en Chile.

Durante su participación en segundo encuentro nacional de laicos en Osorno, José Murillo, realizó un llamado a la comunidad laica, al Gobierno y a la iglesia a cuestionarse el rol en la sociedad actual, de segmentos de la población que comúnmente se ven marginados de las decisiones por un sistema histórico que fomenta el patriarcado en todas las entidades.

En este sentido aseguró, que frente a los cambio de la sociedad chilena, el Gobierno y la iglesia no pueden quedarse al margen, por lo que debieran reconsiderar los roles de los diferentes segmento de la sociedad, ya sea el rol de los que han detentado el poder históricamente, así como de aquellos que han sido históricamente marginados.

Asimismo, aseguró que esto no se trata netamente de un problema a nivel de la iglesia, sino que se trata de un problema que le concierne también al Gobierno y la sociedad, donde, como principal precursor de la democracia debería considerarse la inclusión.

Por lo mismo, aseguró que ante el actual proceso constituyente ejecutado por el Gobierno, debieran considerarse aspectos tan básicos como la exclusión de la mujer dentro de los sistemas de poder, que en muchos casos se ven reflejados en los problemas que constatamos a diario, como discriminación de genero, violencia y abuso.

Finalmente, aseguró que en frente a este tipo de problemas sociales las instancias la jerarquía se preocupa más de conservar y ejercer el poder, en muchos someter a las personas que dependen de ello, en ves de apoyarlos y ayudarlos a ser una sociedad mas critica.