Unicef lanzó una petición de fondos este jueves para reunir más de 900 millones de dólares en 2015 para ayudar a niños afectados por la guerra en Siria.

“La crisis siria representa la mayor amenaza para los niños de nuestro tiempo”, afirmó Maria Calivis, directora regional para Oriente Medio y el norte de África.

“Antes de finales de 2015, las vidas de más de 8,6 millones de niños en la región habrán quedado destrozadas por la violencia y el desplazamiento forzado”, afirmó.

Calivis explicó que el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) necesita en 2015 duplicar el número de niños sirios con acceso a agua potable, saneamiento y educación.

Unicef proseguirá con sus campañas de vacunación contra la poliomielitis y con el suministro de asistencia, incluida ayuda en efectivo y ropa para el invierno, a las familias de unos 850.000 niños afectados por el conflicto.

“Estos compromisos, por un valor de 903 millones de dólares, constituyen el mínimo”, precisó, y pidió “ayuda” a los donantes para convertirlos “en realidad”.

Más de 200.000 personas han muerto y la mitad de la población quedó desplazada por la guerra en Siria, que estalló tras la brutal represión en marzo de 2011 de manifestaciones pacíficas antigubernamentales.