Como un proceso no exento de dificultades calificó Félix Vita, encargado de la Oficina de Asuntos Indígenas de Santa Bárbara, el funcionamiento de esta nueva repartición que acaba de cumplir seis meses desde su creación por parte de la Municipalidad de la comuna.
Los principales problemas, según el personero, están centrados en el abandono en el que se encontraban las comunidades pehuenche santabarbarinas y la situación de precariedad de las familias del Alto Bío Bío que fueron reubicadas debido a la construcción de megaproyectos hidroeléctricos, obligándolas a dejar sus tierras de origen.
Por otro lado, Vita justificó el trabajo de la Oficina de Asuntos Indígenas, ya que son alrededor de dos mil las personas de ascendencia pehuenche las que habitan Santa Bárbara y que frente a esta realidad era necesaria la creación de esta unidad que funciona dos veces a la semana en dependencias del municipio para atender los requerimientos de la comunidad.
Respecto a las gestiones más recientes, el ex alcalde de Alto Bío Bío informó que las familias pehuenche de Santa Bárbara se han visto beneficiadas por primera vez con la entrega de forraje para el ganado tras las pasadas nevazones y donde resultaron afectados.
