Los padres de Víctor Hugo Montoya Encina, quien se encuentra en prisión preventiva acusado por la explosión que afectó a la comisaría de Carabineros de Las Vizcachas la madrugada del sábado 9 de febrero de 2013, manifestaron su molestia por la “invisibilización del caso” en los medios de prensa y anunciaron que al mediodía del próximo sábado realizarán una manifestación en el centro de Santiago, exigiendo la libertad del joven.

En conversación con Agencia UPI Chile, el padre del acusado, Víctor Montoya Zamorano, comentó el estado de su hijo que se encuentra recluido en la Centro de Detención Preventiva de Puente Alto, reconociendo que “si no fuera por la entereza y fuerza que él tiene, la verdad es que nosotros como padres estaríamos destruidos. Su juventud e inocencia que él tiene nos ha podido mantener en pie, porque de otra forma para nosotros sería insoportable. Nosotros vivimos las 24 horas pendientes de él. Y aquí estamos luchando y luchando contra viento y marea porque este Estado de derecho que no nos quiere reconocer la inocencia de mi hijo”.

El 12 de febrero de 2013 el fiscal de la Fiscalía Regional Metropolitana Sur, Raúl Guzmán, y el fiscal adjunto de Puente Alto, Claudio Álvarez, formalizaron al joven por el delito de colocación de artefacto explosivo terrorista. El Tribunal de Garantía de Puente Alto acogió la solicitud de prisión preventiva y esta se ha ido ampliando a solicitud de los persecutores. La investigación judicial por el atentado contra los Juzgados de Garantía de Puente Alto, donde explotó una bomba en el frontis de los Tribunales el 4 de julio 2012, fue anexada por la Fiscalía Regional Metropolitana Sur, a la causa por el ataque al retén.

Consultado por la preocupación de la familia por la forma como los medios de comunicación cubren el caso, Montoya Zamorano relató que “los primeros meses yo tenía todos los días periodistas en mi casa y ellos me andaban buscando a mí. Pero esto ya pasó a un silencio y jamás me llamaron y yo he tenido que andar detrás de ellos. He insistido que los medios de comunicación, tanto escritos como de televisión, puedan visibilizar más el tema, bueno, porque a la Fiscalía le interesa que esto esté en el anonimato”, afirmó.

Respecto del actuar de la fiscalía, Montoya Zamorano dijo que “nosotros no podemos creer, que a casi a un año, en todas las audiencias que hemos tenido en la fiscalía nunca se ha presentado un argumento sólido para que a mi hijo lo inculpen por este atentado. De hecho jamás le han encontrado pólvora en sus manos, en su ropa, le hicieron exámenes de ADN y jamás le han encontrado nada. Entonces, si estamos hablando de un terrorista, mínimo encuéntrenle una traza de pólvora en sus manos o en su ropa. La lógica a mi me indica, que si yo opero pólvora, alguna traza me quedará en mis manos y a él jamás le han encontrado nada”.

Acusado por un supuesto testigo que lo sindica como el conductor que trasladó a los responsables del bombazo en el sector de Casas Viejas, el joven permanece detenido. La fiscalía basó su argumentación para culparlo en los elementos “anarquistas” que el acusado mantenía en su pieza. Montoya es vegano y aficionado a la música hardcore. La familia de Víctor Hugo Montoya asegura que él esa jornada debía encontrarse con una amiga en la zona, lo que explica que lo hayan visto transitar por el lugar en el vehículo que pidió prestado a sus padres.

Un grupo autodenominado “Amigos de la Pólvora”, que en 2012 había publicado en sitios anarquistas una reivindicación del ataque explosivo contra el Tribunal de Puente Alto, adjudicándose este hecho, también asegura ser responsable de la colocación del artefacto que estalló en la comisaría donde dormía un carabinero que resultó herido. El 22 de febrero del año pasado publicó una declaración en la que afirmaban que el joven detenido como responsable “no pertenece a nuestro grupo de afinidad”.

El padre del acusado comentó que tiene mucha fe y esperanza que este año su hijo salga en libertad y libre de todo cargo, diciendo que “creemos que a través del tiempo las cosas se deben ir aclarando. Desgraciadamente este tema de la justicia para nosotros es algo nuevo. Nosotros jamás habíamos estado involucrados en este tipo de situación. Jamás mi familia y yo hemos estado metidos en política. Mi hijo tampoco nunca ha estado metido en nada. El tampoco es anarquista como en un principio quisieron decir los fiscales (Raúl Guzmán y Claudio Álvarez), o que vivía en casa ocupa, él siempre ha sido de nuestra casa, un cabro sano, deportista, profesional”, agregó tajante. Su hijo es egresado de la carrera de Relaciones Públicas de DUOC.

La familia está convocando a amigos y cercanos a reunirse el próximo sábado 8 de febrero, a casi un año de la detención del presunto activista, a una protesta que se realizará al mediodía en la Plaza de Armas de Santiago, para pedir la libertad del acusado, para luego realizar una marcha por el Paseo Ahumada, actividades que contarían la autorización respectiva de las autoridades, según informó la familia.