La alcaldesa de San Fabián de Alico pidió revisar la autorización ambiental entregada al proyecto del embalse Punilla. La obra, destinada al riego de más de 60 mil hectáreas en la provincia de Ñuble, será licitada por el gobierno en noviembre.

La edil Lorena Jardua, llegó hasta las oficinas del Servicio de Evaluación Ambiental para entregar fundamentos técnicos que apuntan a que desde noviembre de 2010, cuando obtuvo la resolución de calificación ambiental, ha habido cambios que no se han considerado en el proyecto.

Nueve años han pasado desde el inicio de la tramitación y según la alcaldesa, la cantidad de familias a erradicar ha aumentado, la zona fue declarada reserva de la Biósfera y hay riesgos geológicos latentes y de actividad volcánica.

En noviembre próximo se licitaría el embalse Punilla, considerado por el gobierno una deuda con los agricultores de Ñuble, pues asegura el riego y permitirá dar un incentivo a la producción agrícola.

Sin embargo, según la alcaldesa Lorena Jardua, todos los beneficios del proyecto los reciben otras comunas, y asegura que en San Fabián de Alico habrá sólo impactos negativos.

La jefa comunal, acompañada de concejales, pidió revisar la autorización ambiental otorgada, pues dice que no se han tomado en cuenta variaciones detectadas por el Sernageomín en la zona tras el terremoto, ni recomendaciones de expertos de la Universidad de Chile en el sentido de abundar estudios en la materia.