Luego de permacer prófugo cerca de 10 días, reapareció en Puerto Montt el carabinero José Luis Paredes junto a la pequeña Monserrat. El efectivo mantenía una orden de detención emanada del Juzgado de Familia de Ancud acusado de desacato y secuestro.

A su arribo a la ciudad, José Luis Paredes conversó con Radio Bío Bío donde detalló los dificiles momentos que le tocó vivir al saber que en cualquier momento podrían quitarle a la menor.

A la vez, se mostró confiado en que la Corte de Apelaciones de Puerto Montt fallará a su favor y, de esta forma, poder formalizar el trámite de adopción de la niña que considera su hija, debido a que la ha criado como guardador desde hace más de dos años. Ahora se muestra más tranquilo tras salir de la clandestinidad para reunirse con su pareja Jocelyn, quien aún permanece internada en el Hospital Base de la ciudad, con síntomas de pérdida producto del estrés generado por la devolución de la pequeña.

Paredes al ser consultado por La Radio sobre la decisión de escapar con la menor luego de saber la determinación del juez de Familia de Ancud de entregar a la niña, señaló que fue un momento muy difícil pero que valía la pena arriesgarse por la felicidad de la niña.

A su vez agradeció el apoyo brindado por el país en esta cruzada para obtener la adopción de la pequeña, ya que como familia no se imaginan una vida sin ella.

El cabo de Carabineros también tuvo palabras de agradecimiento para la institución a la que pertenece por el apoyo que les han brindado, aunque aún resta por definir su situación interna.

Consultado por la responsabilidad del Sename en este caso, José Paredes respondió que fue el propio director nacional de este organismo, Rolando Melo, que reconció públicamente los errores cometidos por diversos profesionales de Sename en Puerto Montt.

Por estos días, José Luis Paredes y su familia esperarán confiados el fallo de la Corte de Apelaciones de Puerto Montt para que sus vidas vuelvan a la normalidad en compañía de la menor, en el hogar que ellos consideran debe estar. Esto, independiente del aspecto legal que hoy los obliga a devolver a la menor para ser dada en adopción a personas que no conoce.