En junio de 2012 María Figueroa se enteró que debía abandonar el lugar en el que ha vivido durante 52 años, propiedad que heredó de sus padres. Las razones corresponden a que en el Humedal Postdam, se espera un parque que incluye juegos para niños.
María Figueroa no posee títulos de propiedad, razón por la cual la municipalidad de Hualpén exige que abandone el lugar. Ella vive en el terreno que a sus padres les regaló la familia Price, entonces dueños del sitio.
Señala que la solución que dan a su problema, es entregar una mediagua para que la levante en un terreno que ella debe buscar. La afectada dice que no aceptará este arreglo, el cual según sus palabras, se ha hecho entre amenazas, lo que perjudica su salud.
Indicó que se desconoce si la propiedad en la que vive, pertenece a la municipalidad de Talcahuano o Hualpén, y que ella no tiene documentos legales para demostrar que ha permanecido en el lugar durante décadas. Firmas y testimonios de vecinos es todo lo que posee para probar que lo que dice es cierto.
Desde el municipio de Hualpén, el secretario municipal de planificación, Patricio Chávez, dijo que esto es un foco de infección, pues la señora no cuenta con electricidad y agua potable.
Figueroa desmiente estos dichos, asegurando que su domicilio cuenta con estos servicios. Por su parte Chávez dice que el municipio apoyará a la afectada, pero que por el momento no puede vivir en el lugar pues es un terreno público, y que ella no tiene títulos de propiedad que la respalden.
