Tras el naufragio de una embarcación en el río Cruces aparecen versiones cruzadas por el accidente. El patrón del bote hundido cuestiona el procedimiento adoptado por la Armada, mientras la institución se defiende argumentando que cumplió con protocolos.
Rigoberto Flández, patrón de la embarcación siniestrada el domingo, dijo que ese día iba para su casa y se vio obligado a llevar a un grupo de personas, después de haber visto a personal de la Armada en el trayecto. Éstos solo se habrían acercado cuando el bote comenzó a hundirse con las personas.
El gobernador marítimo de Valdivia, comandante Manuel Cofré, aseguró que ellos fueron llamados pero no por una emergencia, y ésta sólo fue dada cuando el bote naufragó.
En cuanto al rescate, Flández cuestionó el proceder de los marinos, asegurando que él incluso estuvo al mando de la lancha naval y no los funcionarios de la Capitanía de Puerto.
Lo anterior fue refutado por Cofré, quien señaló que al momento del rescate un sargento quedó al mando y el marinero se lanzó al agua.
En tanto, el marinero de tropa profesional y asistente de policía marítima, Ronald Muñoz, agregó que el patrón de lancha, lejos de cooperar, también fue rescatado.
Los hechos son investigados tanto por la Fiscalía de Valdivia, que encargó diligencias a la Policía de Investigaciones, como por la misma Armada, que indagará las causas de los hechos, el proceder del patrón de lancha y el del mismo personal marítimo.
