La emblemática población Aurora de Chile ya cobró una víctima política y esa fue la ex Intendenta del Bío Bío, Jacqueline Van Rysselberghe. El problema de fondo es la erradicación y radicación de los vecinos del lugar.

Se trata de una toma de terrenos histórica, que con divisiones internas se niega a desaparecer. El gobierno acusa falta de información, pero los dardos justamente van hacia las autoridades.

Los proyectos del Gobierno pretenden la salida de habitantes del sector para el paso de un nuevo viaducto que reemplazará el recordado Puente Viejo que unía Concepción con San Pedro de la Paz. Cuando una consulta popular organizada por los vecinos, en su mayoría rechaza la erradicación, las autoridades aseguran no conocer las preguntas realizadas en el plebiscito, y al mismo tiempo, acusan desinformación de los pobladores.

Probablemente, éste es uno de los desacuerdos más antiguo de la intercomuna, involucrando a los ciudadanos del sector Pedro de Valdivia Bajo, el Gobierno y la Municipalidad.

Y es que una toma de décadas, con avances personales en ganar espacios al río y construir viviendas dignas pese a la tardía urbanización en el sector, se ponen en la balanza cuando la autoridad por estos días ofrece departamentes con metros cuadrados que los limitan y simplemente rebajan su actual calidad de vida.

El paño urbano ya lo trató de ordenar Jacqueline Van Rysselberghe cuando fue alcaldesa. Intentó buscar simpatías en el Gobierno cuando fue Intendenta, incluso recurriendo a disposiciones post terremoto, que de paso le costaron el cargo.

Ahora el problema lo debe enfrentar el intendente Víctor Lobos, quien desconoce cuál fue la consulta en estricto rigor, pero sí teme que los habitantes no conozcan la verdadera oferta.

Y la oferta es móvil. Posiblemente se reestudien los casos de personas que no quieren departamento y sí casas; y de las que no quieren salir del sector y pretenden ser radicados en el mismo lugar. Sin embargo, espacio para todos no hay, por lo tanto, deberán reorganizar el paño urbano.

A cargo del proyecto está la EGIS municipal, con colaboración del MOP, que debe resguardar el paso del puente y el uso de algunos terrenos. Lo mismo Vivienda, que debe aportar recursos sectoriales.

El proyecto al parecer deberá -a lo menos- ser revisado una vez más y ahora con la comunidad.