La inseguridad generada en México por el crimen organizado provocó el cierre de más de 160.000 empresas tan sólo en 2011, según la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), informó este miércoles la prensa mexicana, lo que fue desestimado por el gobierno mexicano.

“El crimen organizado está deteriorando la competitividad de las entidades federativas, desalentando la inversión nacional y extranjera, causando el cierre de empresas formales. Tan sólo en 2011 más de 160.000 empresas dejaron de operar en todo el país”, indicó el presidente de la Coparmex, Alberto Espinosa.

Espinosa añadió que las empresas también se están viendo afectadas por el aumento en la prima de los seguros, que subió 30% en el norte del país, y que “24 millones de viajeros fronterizos prefieren ya no hospedarse en México, con lo que se ha perdido una derrama económica de más de 800 millones dólares en los últimos cinco años”.

“En México la inseguridad está alcanzando niveles no vistos en décadas”, lamentó el líder empresarial, que sostuvo que “lo más grave es que empresarios y familias enteras se van a otros países, en busca de seguridad y bienestar”.

El presidente de la Coparmex pidió evaluar la estrategia de lucha contra la delincuencia, del gobierno del presidente Felipe Calderón, basada en el uso del ejército para combatir las bandas del crimen organizado, y abogó por “diseñar nuevos programas, más eficaces”.

Ante esta información, la secretaría de Economía expresó en un comunicado su rechazo categórico ante tales afirmaciones, afirmando que son cifras carentes de “rigor metodológico” y desproporicionadas.

“Esta información no es consistente con la creación del empleo formal durante ese año (590.797 empleos en términos netos), ni con el crecimiento que registró la economía mexicana en 2011 (3,9%)”, señala el comunicado de Economía.