El gobierno sirio “fracasó en proteger a su pueblo”, denunció el jueves la Comisión de investigación internacional sobre Siria, que tenía mandato del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

“Desde noviembre de 2011, sus fuerzas han cometido serias, generalizadas y sistemáticas violaciones de los derechos humanos”, escribe la Comisión que interrogó a 136 nuevas víctimas desde noviembre pasado, fecha de su anterior informe.

La comisión concluyó en su primer informe de noviembre que las fuerzas del orden sirias cometieron crímenes contra la humanidad debido a la represión brutal de la revuelta en el país.

Más de 500 niños resultaron muertos desde el inicio de la rebelión, en marzo de 2011, según la Comisión que cita una “fuente fiable”. Diciembre pasado fue el mes más sangriento, con 80 niños muertos, seguido de enero 2012 (72 muertos).

El balance de la violencia en Siria se eleva ahora, según los militantes, a 7.600 muertos, en su gran mayoría civiles.