La justicia francesa abrió una investigación sobre la financiación de la campaña electoral del presidente francés Nicolas Sarkozy en 2007 por las sospechas de contribuciones ilegales de la heredera del emporio de cosméticos L’Oreal, Liliane Bettencourt, informó este miércoles un diario francés.
El diario regional Sud-Ouest anunció en su página internet que la justicia pidió las cuentas de la campaña que permitió la llegada de Sarkozy al Elíseo en 2007, al derrotar en la segunda vuelta a la socialista Segolene Royal.
En su primera reacción, el secretario general del partido de Sarkozy (UMP), Jean-François Copé, se limitó a recordar “el principio de la presunción de inocencia”, mientras una fuente cercana al presidente lamentó que “todo esto sea difundido en la prensa” a sólo tres meses de las próximas elecciones presidenciales.
La ex contable de Bettencourt, Claire Thibout, declaró a la justicia que había entregado 50.000 euros en efectivo al ex gestor de fortuna de la multimillonaria, Patrice de Maistre, que le dio a entender que se los daría al día siguiente a Eric Woerth, tesorero de la UMP y ministro del Presupuesto, para la campaña de Sarkozy.
Este miércoles, la portavoz del Gobierno Valerie Pecresse se negó a comentar “un proceso judicial en curso” y sólo recordó que las cuentas de 2007 eran “públicas” y habían recibido el visto bueno de Comisión Nacional de las Cuentas de Campaña y el Consejo Constitucional.
