En el Segundo Seminario de Cultura y Economía, organizado por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, el Secretario de Estado dio a conocer cifras -hasta ahora inéditas- que demuestran que el sector aporta un 1.6% al PIB, superando incluso a áreas como la pesca.

Cruz-Coke, quien inauguró el Seminario junto a su par de Hacienda, Felipe Larraín, anunció además el Primer Mapeo de Industrias Creativas, que permitirá conocerlas y determinar su potencial de crecimiento, tal como ya se hace a nivel internacional.

El Seminario, que busca reflexionar acerca del rol de la Cultura en el desarrollo económico y social del país, incluyó el análisis de experiencias extranjeras en voz de sus protagonistas, como el ex Ministro de Cultura de Brasil, Juca Ferreira; la directora de Film New Zealand, Gisella Carr; y el director de Creative England y ex asesor del gobierno laborista, John Newbigin. También se expusieron casos de innovación cultural, con novedosos sistemas de financiamiento, como el crowdfunding, expuesto por el fundador de la plataforma IndieGoGo, o la exitosa Tarjeta Espectacular de Uruguay.

El encargado de abrir el Seminario fue el australiano David Throsby, considerado una de las máximas autoridades académicas a nivel internacional en el tema del aporte de la Cultura al desarrollo económico, quien propuso el concepto de “desarrollo sustentable”.

El ministro Luciano Cruz-Coke, llamó a reconocer “que la cultura es capaz de contribuir al crecimiento económico, a la vez que contribuye al desarrollo humano de la sociedad”. Para respaldar sus palabras, el Secretario de Estado presentó las primeras conclusiones de la Cuenta Satélite de Cultura, una radiografía económica de un sector que tradicionalmente no se considera en la medición del PIB, y que arrojó sorpresivas conclusiones.

“Tenemos los primeros estudios que nos señalan que la cultura no es sólo el sector del permanente subsidio, sino uno relevante para el desarrollo económico”, dijo. Reveló: “El sector cultural contribuyó un 1,6% al PIB de 2009, lo que implica mayor peso que el sector pesquero y equivalente al sector comunicaciones”. Cruz-Coke destacó también que la Cultura en Chile genera más de 240 mil empleos, un 2,3% de la fuerza laboral del país, concentrado principalmente en pequeñas y medianas empresas que facturan el 1,4% de las ventas totales de las empresas en Chile (US$7.507 millones en ventas).

Esta Cuenta Satélite será profundizada con el primer Mapeo de Industrias Creativas, que el Consejo de Cultura ya está preparando y que considera un análisis detallado de sectores tradicionalmente conocidos como culturales, tales como artes visuales, cine, televisión, música, medios de comunicación, publicidad, turismo patrimonial, moda o diseño, más cualquier área en la que la creatividad sea importante, como la industria del software.

El Ministro de Cultura reconoció también que existen brechas en cuanto a comercio exterior (las importaciones superan a las exportaciones en varios millones de dólares, principalmente por la compra de tecnología) y falta de equidad en el consumo cultural. Como ejemplo citó que el quinto quintil invierte en promedio $4.813 en cultura al mes, mientras el primer quintil destina $46.460 mensuales a ese ítem.

Cruz-Coke agregó que el aporte del Estado a la Cultura ha ido creciendo sostenidamente con el tiempo, pero el aporte del sector privado sigue siendo muy bajo, en una proporción de 95% de presupuesto público versus un 5% de donaciones privadas con incentivo tributario.

“Desde el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes estamos impulsando cuatro caminos principales de trabajo para lograr el desarrollo del sector cultural como parte del desarrollo económico y humano, buscando siempre la construcción de una sociedad integral”, anunció Cruz-Coke, quien aclaró que “este camino considera por una parte un rol directo del Estado como impulsor activo, pero también facilita el empoderamiento de la sociedad civil y de los gestores y emprendedores del ámbito cultural”.

El primer camino es el incentivo a la participación de la sociedad civil en cultura, principalmente a través de la renovada Ley de Donaciones Culturales.

La segunda acción concreta es la consolidación de una red de infraestructura cultural en todo el país, que incluye 5 grandes teatros regionales y 51 centros culturales, contando los insulares de Rapa Nui y Chiloé. Esta red “facilitará la circulación a nivel nacional de las obras de nuestros creadores y el goce del público a lo largo del territorio”, dijo el Ministro.

El tercer camino es el fortalecimiento de las instituciones culturales. “Sabemos bien el difícil escenario que enfrentan, con las precariedades presupuestarias y las dificultades de gestión, de financiamiento y de permanencia en el tiempo, cuando son, precisamente, las que deben mediar la relación entre creadores y públicos”, reconoció Cruz-Coke, anunciando un cambio en los Fondos de Cultura, que a partir de este año incluyen una línea de apoyo a mediano plazo a organizaciones culturales en dos escalas: medianas y pequeñas.

Finalmente, el cuarto camino anunciado por Cruz-Coke son las Estadísticas en Cultura. “Contar con insumos estadísticos y datos confiables permite no sólo focalizar los recursos públicos, sino también reconocer empíricamente la contribución del sector cultural al desarrollo económico y social”, dijo Cruz-Coke.