Las operaciones de bombeo de los depósitos del mercante encallado en aguas de Nueva Zelanda se suspendieron este martes debido al mal tiempo, que zarandea el barco y pone en peligro a los equipos de socorro, anunció el Servicio Marítimo neozelandés (MNZ).

El “Rena”, un porta-contenedores que encalló el 5 de octubre en un arrecife a 22 km de Tauranga (norte), estaba sacudido por olas de 5 metros y vientos de 65 km/h, según el MNZ.

Desde el inicio de las operaciones el lunes, unas 90 toneladas de carburante, de un total de 1.300, fueron bombeadas a un pontón situado a media milla (800 metros) del mercante de bandera liberiana.

En caso de romperse el casco dañado a nivel de la proa, podría liberar el combustible sobre el arrecife Astrolabio, reconocido por la riqueza de su fauna y su flora, situado en una de las ensenadas más hermosas del país, la bahía de Plenty.