La Cámara de Diputados de México aprobó este jueves una ley que establece por primera vez penas de hasta 70 años de cárcel para secuestradores que asesinen o mutilen a sus víctimas, lo que equivaldría casi a una cadena perpetua, informó el organismo.

Con 353 votos a favor, 8 abstenciones y 4 en contra, la Cámara aprobó el proyecto -ya avalado por el Senado- que crea la ley para prevenir y sancionar los delitos en materia de secuestro, indicó en un comunicado.

La actual legislación, que en algunos estados fijaba condenas de hasta 50 años de cárcel, no consideraba penas para un secuestrador que mutilara o asesinara a su víctima, casos en los cuales se juzgaba por separado como homicidio.

La ley aprobada por el Congreso -que pasará a sanción presidencial- también castiga la participación de un policía o de una persona de confianza del rehén, y crea un fondo para resarcir el daño a las víctimas de secuestros.

La presidenta de la Asociación Alto al Secuestro, Miranda de Wallace, cuyo hijo fue secuestrado y asesinado, explicó a la AFP que hasta ahora cada uno de los 32 estados de México tenían legislaciones distintas para el secuestro que involucrara asesinato.

En la mayoría de los estados las penas llegaba hasta un máximo de 50 años.

Con la ley se llenan varias lagunas legislativas que había en cuanto al secuestro en México, donde el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública ha documentado unos 5.300 secuestros en los últimos cuatro años, y muchas de esas víctimas fueron asesinadas a pesar del pago del rescate.

La ley también contempla atenuantes cuando el plagiario no mate a la víctima y agravantes cuando entre los secuestradores haya miembros de instituciones públicas como la policía.