Besarse públicamente en la Universidad de Zimbabue, en Harare, es motivo de castigos que van desde una multa a una sanción disciplinaria. Contra esta nueva regla, se movilizó en estos últimos días el sindicato de estudiantes.

Los estudiantes “sorprendidos en una posición íntima como besándose o teniendo relaciones sexuales en los lugares públicos” serán castigados, indica una circular colgada en los vestíbulos de las residencias universitarias.

Está igualmente prohibido invitar a personas del sexo opuesto a las habitaciones del campus universitario y “vagar por los rincones oscuros fuera de la sala de deportes y de las salas de conferencia”.

“Somos contrarios a estas reglas que consideramos anárquicas y represivas”, declaró a la AFP el presidente del Sindicato Nacional de Estudiantes, Gilbert Mutubuki. “Llamamos a los estudiantes a resistir a este reglamento. Estas reglas reducen la universidad a una escuela de primaria”, agregó.

“Creemos que estas medidas están destinadas a limitar la libertad de asociación de estudiantes”, denunció Mutubuki.