Las tropas de élite iraquíes luchaban este miércoles contra los yihadistas al sur de Bagdad apoyadas por la aviación de Estados Unidos, horas antes de que el presidente estadounidense Barack Obama aborde con sus generales la nueva estrategia contra el grupo Estado Islámico (EI).

Los aviones de caza estadounidenses mataron a al menos cuatro yihadistas en ataques contra tres objetivos del EI al sur de Bagdad, según el ejército iraquí y jefes tribales.

Los ataques buscaban apoyar la ofensiva del ejército iraquí iniciada la víspera en el sector de Fadhiliya, a menos de 50 kilómetros al sur de Bagdad, si bien los soldados “no lograron penetrar” en el sector, indicó un jefe de la tribu de los janabi, quien precisó que los militares formaban parte de la “Brigada de Oro”, la mejor del país.

Más lejos de la capital, en la provincia de Anbar, murieron siete personas en un ataque suicida con coche bomba contra un puente estratégico en Ramadi, que resultó totalmente destruido.

Obama consulta a su estado mayor

Los alrededores de Bagdad se convirtieron en los últimos días en un objetivo clave de la campaña de ataques aéreos estadounidenses, que arrancaron el 8 de octubre y se están extendiendo por todo el país.

La región de Jurf al Sajr representa un sector especialmente importante, ya que se encuentra entre Faluya – una ciudad de mayoría sunita al oeste de Bagdad en manos del EI- y dos santuarios del chiismo -Kerbala y Nayaf- al sur de la capital.

Obama, quien desveló la semana pasada su estrategia contra el EI, abordará el miércoles en Tampa (Florida) “el plan para poner en marcha una coalición internacional [...] para destruir al EI” junto al jefe del mando central para Oriente Medio y Asia Central (Centcom), el general Lloyd Austin, según la Casa Blanca.

El general Martin Dempsey, presidente del Estado Mayor Conjunto, sugirió el martes que podrían ser enviados a Irak consejeros militares, aunque su portavoz, el coronel Ed Thomas, precisó sus declaraciones.

El general no piensa que “haya una necesidad militar [que justifique] que nuestros consejeros acompañen al frente a los soldados iraquíes”, dijo Thomas.

Tras la retirada de las últimos soldados estadounidenses de Irak a finales de 2011, Obama ha reiterado en varias ocasiones que no enviará tropas terrestres a combatir en el país.

Los responsables estadounidenses indicaron, no obstante, el martes su determinación a atacar los “santuarios” e infraestructuras del EI en la vecina Siria, donde los yihadistas sunitas declararon un califato en los territorios bajo su control en este país, sumido en una guerra civil desde 2011, y en Irak.

50 muertos en Siria

En Siria, los bombardeos de la aviación del régimen dejaron 50 muertos en dos días en Talbisé (centro), una localidad rebelde asediada desde hace dos años, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

Asimismo, el EI derribó el martes un avión militar sirio mientras bombardeaba Raqa (norte), uno de sus bastiones, según esta ONG.

El EI está acusado de cometer atrocidades en Siria y en Irak, entre ellas, la reciente decapitación de dos periodistas estadounidenses y de un trabajador humanitario británico.

Los países occidentales se muestran cada vez más preocupados por el avance de este grupo sunita radical y, sobre todo, por los ciudadanos occidentales que luchan junto a los yihadistas, ya que constituirían un potencial peligro a su regreso.

El consejo de los ulemas, la más alta autoridad religiosa en Arabia Saudita, prohibió el miércoles a los sauditas que se unan a los grupos yihadistas. “Está prohibido [en virtud de la sharia] ir a combatir en las zonas de conflicto”, señaló en un comunicado.