La UDI en la región del Bío-Bío quedó con sus relaciones “Trizadas” -por decir los menos- luego de la salida del Gobernador Alejandro Reyes, quien acusó a la directiva de nulo apoyo y dejando en evidencia presiones para lograr el cambio del abogado en el cargo. Desde la directiva gremialista local, no comparten dichos de la ex autoridad.

La guerrilla interna no concluye en la UDI: mientras militantes dan cuenta del viaje que iniciaran por Estados Unidos los diputados Jorge Ulloa e Iván Norambuena -éste último presidente del gremialismo en el Bío-Bío- aún quedan resquemores por las críticas emitidas por Alejandro Reyes en contra de éstos mismos dirigentes, responsabilizándolos de alguna manera por su salida.

Si bien el diputado Sergio Bobadilla, Secretario de la UDI regional, valoró la gestión de Reyes como ex gobernador, dijo no compartir las críticas contra la directiva por el supuesto nulo respaldo que denunció el renunciado gobernador.

La crisis no se queda en la UDI y trasciende hasta el oficialismo, donde el partido del Presidente de la República también tiene su opinión. Ante tal revuelo, el presidente regional de RN, Claudio Eguiluz, calificó el suceso político de la semana como un “triste espectáculo”.

En lo concreto, Reyes se desempeñará como Gobernador hasta el martes, para después evaluar su futuro político; incluso una eventual renuncia al partido que -según dice- ya no es el mismo en el que decidió militar.