Diarios y revistas en Europa se lamentan por las condiciones que les impone Apple para comercializar sus títulos y suscripciones en su iPad, la ineludible tableta fabricada por el gigante tecnológico estadounidense que es motivo ahora de “peleas terribles” con la prensa.

En Francia, los directores de publicación son unánimes: las condiciones impuestas desde mediados de febrero por Apple para los abonados de iPad, iPhone y el reproductor iPod les son desfavorables.

“Hay peleas terribles, es demasiado complicado”, admite Philippe Jannet, director general del diario online Monde Interactif y presidente del Grupo de Editores de Servicios en Línea (Geste).

“No se puede aceptar que Apple nos imponga los precios, la repartición de los ingresos y el control de los datos (sobre los compradores ocasionales o los abonados). Son cosas fundamentales para la prensa”, prosigue.

Debido en particular a la forma en que Apple guarda celosamente los datos de los suscriptores, el diario británico Financial Times se rebeló esta semana al decir que, en estas condiciones, se las arreglaría sin el iPad.

Agrupados a nivel europeo, los editores alertaron a los servicios de competencia de la Comisión Europea y, en Bélgica, Apple está ahora siendo investigado por abuso de posición dominante.

“El problema, es que si quieres estar presente en el (teléfono multifunción) iPhone y el iPad, tienes que pasar por las horcas caudinas de Apple”, dijo un editor que pidió el anonimato.

La lista de quejas es larga, como da fe una carta abierta del sindicato francés de revistas (SPM) enviada a Apple esta semana.

Las revistas francesas cuestionan en primer lugar el precio de venta del título o de la suscripción (0,79, 1,29 o 1,59 euro el número, por ejemplo), que Apple impone actualmente en su tienda de aplicaciones, la App Store.

“Dado que no puede elegir libremente el precio de venta”, el SPM pide “una mayor flexibilidad”.

A continuación, las revistas reclaman que el comprador tenga que pasar obligatoriamente por el sistema de Apple -el In App Purchase- para pagar su compra.

En ese pasaje Apple se queda con el 30%, una comisión “comprensible (…) en la adquisición de un nuevo abonado a través de la App Store”, según la SPM, que estima no obstante que lo lógico sería que la comisión (de Apple) sea menor cuando se renueva la suscripción”.

En conclusión, las revistas están indignadas por la estricta política de control de datos de los clientes de Apple, información clave para una publicación que desea tener acceso a tales datos para reactivar a un suscriptor, y proponerle promociones u otros títulos.

Apple hizo cierto gesto, pero no fue suficiente para aplacar los ánimos.

“Piden al usuario que se suscribe si acepta hacer una excepción en su política de privacidad para que se retransmitan sus datos”, explica Jannet.

“¡El editor ni siquiera es mencionado!”, reclama, diciendo que de esta forma Apple no está generando en el comprador ningún deseo de responder positivamente.