El consagrado director nacional Maximiano Valdés, condujo con acierto y precisión, el undécimo concierto de la temporada 2010 de la Orquesta Sinfónica de Chile en el Teatro Universidad de Chile, que el músico describió como “difícil, pero estimulante”.
Max Valdés
La presentación comenzó con la interpretación de ‘La Alborada del gracioso’ del talentoso compositor francés Maurice Ravel, una obra breve, brillante, imaginativa y de mucho carácter, con una brillante interpretación la agrupación musical, que supo captar con gran calidad, el pintoresco espíritu del autor galo.
A continuación, el violinista ruso radicado en Inglaterra Yuri Zhislin, recientemente descrito como un músico con talento lírico y temperamento verdaderamente romántico, fue el solista del Concierto para violín y orquesta del maestro chilenol Juan Orrego-Salas, una composición escrita a comienzos de la década de 1980 y que también permitió el lucimiento del director, el solista europeo y la orquesta.
El programa incluyó, finalmente, selecciones de la suite del ballet ‘Romeo y Julieta’ del compositor ruso Serguei Prokofiev, indudablemente el número central del programa, con unaovacionada presentación de la Sinfónica, que destacó la buena calidad de instrumentistas de todos sus integrantes
El concierto se repite este sábado a las 19:30 horas, con entradas a la venta desde 4 mil 500 pesos general en Providencia 043, Metro Baquedano.
