El juez Baltasar Garzón negó este jueves en su declaración ante el Tribunal Supremo haber recibido dinero del banco Santander para la organización de unos cursos en la Universidad de Nueva York, donde estuvo como “profesor investigador” entre 2005 y 2006.

El juez Garzón “negó haber recibido cantidad alguna” del primer banco español en su declaración este jueves ante el magistrado Manuel Marchena, dijo su abogado, Enrique Molina, a los periodistas a la salida del Tribunal Supremo, donde Garzón declaró durante cerca de cinco horas.

Garzón, que con toda probabilidad será juzgado por su intento de investigar los crímenes cometidos durante la Guerra Civil y la dictadura franquista (1936-1975), se enfrenta a las acusaciones de cohecho (soborno, ndlr) y prevaricación (dictar una resolución injusta a sabiendas de que lo es, ndlr) por el supuesto cobro de unos 302.000 dólares por unos cursos en Nueva York.

Según los abogados José Luis Mazón y Antonio Panea, que presentaron la querella contra Garzón, el Santander habría pagado ese dinero por lo que ponen en relación este hecho, con la posterior decisión de Garzón de archivar una denuncia por un delito fiscal contra directivos del primer banco español, incluido su presidente Emilio Botín.

El juez, que no contestó a las preguntas de la acusación popular, detalló al juez instructor cuales fueron sus honorarios durante el tiempo que pasó en la universidad de Nueva York entre marzo de 2005 y junio de 2006 como “profesor investigador” durante un periodo de estudio para lo que había recibido el permiso de las autoridades judiciales, según su abogado.

Garzón defiende que el Centro Rey Juan Carlos I de la Universidad de Nueva York le pagó sus honorarios por sus conferencias, con “absoluta independencia” de que ese Centro contara con “patrocinio del banco Santander”.

Molina añadió que “Garzón no se siente perseguido y cree que le perjudican las manifestaciones de apoyo popular en su favor, que no son controladas por él”.