Una denominada “relación sana”, es aquella que se basa en la confianza, comunicación, respeto, paciencia y empatía con la pareja, entre otros aspectos.

Pero, ¿realmente estás viviendo una relación que te hace bien? En este contexto, es necesario profundizar y evaluar el vínculo que tienes con la otra persona y cómo te hace sentir.

“Mientras que diferentes terapeutas abordarán los problemas de una pareja a su manera, con base en su enfoque clínico y personalidad, hay algunas preguntas básicas que siempre pueden ser útiles al evaluar el estado de una relación”, plantea Robert Taibbi, licenciado en Trabajo Social, en una columna del sitio especializado Psychology Today.

De ese modo, el experto elaboró 9 preguntas que deberías hacerte, para evaluar si tu relación es sana:

1. ¿Cuál es tu calidad emocional en la relación?

Sobre este primer aspecto, el especialista señala que debes preguntarte si te sientes feliz, deprimido, bien o ansioso en pareja. “Si vivieras uno de estos días promedio una y otra vez, ¿sería una vida o relación ‘lo suficientemente buena’?“, plantea Taibbi.

Para esto debes tener en cuenta que tu pareja, al igual que todo el mundo, tiene diversos estados anímicos. Pero independiente de eso, “¿un día promedio es bueno en tu relación?”

2. ¿Te sientes seguro(a) hablando con tu pareja?

“Probablemente esta debería haber sido la primera pregunta porque, de muchas formas, este es el elemento más importante de cualquier relación“, destaca el experto.

En este contexto, señala que debes preguntarte: ¿te sientes lo suficientemente seguro como para ser honesto(a) cuando hace falta? ¿Internalizas tus emociones, las retienes o te culpas por los problemas?

3. En las discusiones, ¿pueden controlarlas para que no sean destructivas ni física ni emocionalmente?

Está bien discutir ocasionalmente. Sin embargo, el problema más grande radica en la regulación emocional. Es decir, la capacidad de controlar las emociones fuertes, darse cuenta de que no están llegando a ningún lado con el conflicto y que ambas personas estén tranquilas y enfocadas en solucionarlo.

“Pueden haber algunas diferencias, como que a uno de los dos le toma más tiempo calmarse (…) Pero si siempre se trata sobre quién gana, tienen un gran problema“, advierte.

Pexels

4. ¿Pueden volver atrás y resolver el problema?

“Volver atrás no es solo tener una discusión, apagar las llamas, aplicarse la ley del hielo por horas o días para luego volver a la normalidad y hacer como que no pasó nada. Esto se llama esconderlo debajo de la alfombra“, describe Taibbi.

En este caso, debes preguntarte si realmente pueden hablar sobre los conflictos o tener una conversación productiva. De ese modo encontrar un plan de trabajo para solucionarlo, y no añadirlo a lista de problemas sin resolver.

5. Ceder: ¿Pueden llegar a acuerdos de ganar-ganar?

Tras terminar una discusión, puede que uno de ustedes invariablemente ceda. En esos casos, es común escuchar frases como: “Entiendo, lo siento. Lo haré mejor. Claro, hagámoslo a tu manera”.

Sin embargo, debes considerar que eso no es resolver el problema, sino más bien ceder ante el otro para evitar un conflicto. Eso es porque sientes que no puedes ganarle.

6. ¿Hay suficientes ‘buenos tiempos’ para que valgan la pena los malos?

La primera pregunta hablaba sobre el clima emocional, pero esta se relaciona con las experiencias. “Sí, las relaciones tienen altas y bajas, pero en general, al dar un paso atrás para observar el todo, ¿Hay suficientes experiencias buenas, no solo para sobrevivir, sino para hacer que el día a día sea lo suficientemente bueno?“, cuestiona.

Pexels

7. ¿Sienten que ambos trabajan bien como equipo?

“¿Sientes que ambos se cuidan las espaldas y se preocupan por la felicidad del otro?”, plantea. Según explica experto, si la relación está desbalanceada y se trata de un “sálvese quien pueda”, solo existirá resentimiento y soledad.

8. ¿Puedes ser tu misma(o)?

“Para ti, y solo para ti, ¿sientes que puedes ser tú misma, que eres amada y apoyada, que si surgen problemas pueden resolverse y que la vida es más que solo subsistir y aceptar, que la relación tiene recompensas que no puedes obtener de ningún otro lado y que no quieres perder?”, plantea.

9. ¿Conservar o cambiar?

Finalmente, el especialista señala que debes hacer una evaluación general de tu relación. “¿Querrías conservarla y la vida que viene con ella? ¿o no? ¿Qué más cambiarías?“, concluye.