Chris Fantetti, un joven luchador británico de 26 años que vio cómo su carrera se terminó por un extraño padecimiento, mostró en un video cómo vive con los espasmos que sufre. “Parece que tengo bichos bajo la piel”, dijo.
Se trata de la enfermedad de Lyme, “una infección bacteriana que se adquiere por la picadura de una garrapata infectada”, según informa el sitio especializado MedlinePlus.
Algunas celebridades la han padecido, entre ellas Avril Lavigne, Thalía, Alec Baldwin, Richard Gere y Jamie Lynn Sigler,
Sus principales síntomas son fiebre, dolor de cabeza y cuerpo, rigidez en el cuello y cansancio. No obstante, Fantetti también presentó contracciones musculares en sus extremidades, debido al tiempo que tardó en ser diagnosticado.
Según contó el portal británico Daily Mail, asistió en diversas oportunidades a distintos doctores, hasta que viajó a Alemania y logró conocer la realidad.
Fue en enero de 2018 cuando comenzó a sentir los primeros síntomas y, más tarde, presentó debilidades en su espalda que no le permitieron seguir compitiendo en la lucha.
“Estaba en constante agonía, todos los días mis brazos cambiaban de temperatura y tenía un fuerte dolor en todo el cuerpo. Tenía dolores punzantes y mi cuerpo comenzaría a temblar y temblar (…) Al principio, los médicos me decían que era asma, así que me dieron bombas y esteroides para el asma. Entonces ambos dijeron que todo estaba en mi cabeza”, narró.
Añadió que en ocasiones sintió “que la gente pensaba que me estaba volviendo loco, casi sentí que lo estaba haciendo”.
“Tengo alrededor de mil fasciculaciones (contracciones musculares) al día y realmente parece que tengo bichos arrastrándose debajo de mi piel cuando está en su peor momento”, dijo.
Heidi Oldfield, de 23 años, ha estado con él durante los últimos meses. “Ahora apenas podemos salir de la casa. Solía ir al gimnasio todo el tiempo, era un verdadero luchador, pero ahora no puede levantarse de la cama o ducharse sin ayuda”, contó al medio.
Expertos de MedlinePlus advierten que la enfermedad de Lyme es difícil de diagnosticar, pues sus síntomas son parecidos a una gripe normal y la picadura de la garrapata podría ser muy diminuta.
Los tratamientos de la enfermedad incluyen antibióticos y analgésicos -si es que comenzaron a sentirse síntomas-. “Cuanto antes comience el tratamiento, más rápida y completa será la recuperación”, sentencia el sitio.
