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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

En Estados Unidos, la administración Trump ha generado polémica al apuntar hacia la deportación de Sofía, una niña mexicana de 4 años con síndrome del intestino corto, una enfermedad grave que la mantiene conectada a terapia intravenosa y máquinas para sobrevivir. Sofía y su familia, quienes ingresaron legalmente al país en 2023, recibieron la noticia de que deben autodeportarse o enfrentar la expulsión.

Medios en Estados Unidos informaron sobre un nuevo caso polémico de deportación, esto porque la administración Trump ahora apunta hacia una niña de 4 años llamada Sofía, con una grave enfermedad, y su familia mexicana.

La pequeña padece el síndrome del intestino corto, que, a grandes rasgos, impide que la persona pueda absorver los nutrientes necesarios. Por lo mismo, pasa 14 horas al día con una terapia intravenosa y conectada a máquinas.

El tratamiento lo realiza entre su casa, en Bakersfield (California) y el hospital Infantil de Los Angeles. Actualmente, esto sólo puede obtenerlo en Estados Unidos.

Sofía y sus padres habían ingresado a Estados Unidos a través de un programa humanitario en 2023. Hasta fines de 2024, se mantenían de manera totalmente legal en ese país.

De acuerdo al diario El País, la nueva administración revocó el permiso CBP One, por lo que ya se les avisó que deberán autodeportarse o, en su defecto, serán expulsados del país por las autoridades.

Estados Unidos podría deportar a Sofía, niña mexicana gravemente enferma

Deysi Vargas, madre de la niña, expuso en una rueda de prensa que se han asesorado con abogados para detener la situación, pero el futuro sigue siendo incierto.

“Mi hija esta conectada a tubos 14 horas cada noche para sobrevivir. Cuando vivíamos en México, mi hija no mejoró. Ahora, con la ayuda que he recibido en Estados Unidos, mi hija tiene la oportunidad de salir del hospital, conocer el mundo y vivir como una niña normal”, indicó.

Asimismo Gina Amato, abogada de la familia, aseveró que: “Si la deportan y le niegan el acceso a la atención médica especializada, los médicos de Sofía han sido claros al afirmar que morirá en cuestión de días”.

“Deportar a esta familia en estas condiciones no solo es ilegal, sino que constituye una falta moral que viola los principios de humanidad y decencia”, agregó.

Por otro lado, se mostró un documento del propio hospital, el cual recalca que el tratamiento no puede administrarse fuera de Estados Unidos. “Es imperativo que ella permanezca aquí”, detallaron.

La última jugada de la familia fue el envío de una carta a la secretaria de Seguridad, Kristi Noem, la cual fue firmada por 36 congresistas del Partido Demócrata.

“Creemos que la situación de esta familia responde claramente a la necesidad de ayuda humanitaria. Es nuestro deber proteger a los enfermos, vulnerables e indefensos”, sostuvieron.